Los EEUU llegaron a Iraq en el 2003, con la guerra iniciada por la gestión Bush-Cheney que siguió al atentado contra las torres gemelas. Este año, cuando la presencia militar estadounidense en Iraq llega a los 18 años, parece que arrancan a irse.
Según informó Yahoo News, hoy salió un comunicado conjunto del gobierno que encabeza Joe Biden y el gobierno iraquí en el que se anuncia el retiro de las tropas de combate estadounidenses. Sin embargo, unos cuántos cientos de soldados norteamericanos se quedarán allí en funciones de asistencia y entrenamiento de las tropas iraquíes.
El comunicado, firmado por ambos países, dice: "Las partes confirmaron que la misión de los EEUU y las fuerzas de la Coalición ha pasado a concentrarse en entrenar y asesorar, permitiendo la relocalización de todas las tropas de combate que permanezcan en Iraq, con el calendario a ser definido en próximas charlas técnicas".
Los iraquíes, por su parte, se comprometieron a defender las bases donde estén los soldados que allí se queden. El anuncio llega después de una escalada en los bombazos que intercambian rutinariamente las tropas estadounidenses y los paramilitares chiitas que hay en la zona.
Esta política por parte de Biden representa uno de las llamativas continuidades que existen entre su gobierno y el de Donald Trump. En los meses previos a dejar la presidencia, Trump había ordenado una importante retirada de tropas de Iraq y Afganistán. Ambos líderes parecen acordar con la idea de intentar terminar con las "guerras eternas" en que Estados Unidos está involucrado en el Medio Oriente.
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