Patricia Bullrich y Sergio Berni participaron en una entrevista conjunta con el periodista Jorge Fontevecchia del diario Perfil, tras el que se produjo un llamativo cruce de la grieta política que separa a Juntos por el Cambio y el Frente de Todos.
Así lo reveló el propio Fontevecchia, según quien tras la larga conversación con ambos, ya distendidos, Berni le dijo a la ex ministra: “Te imaginás lo que hubiéramos hecho si estábamos juntos”, y ella, rápida, le respondió: “Cuando sea presidenta, te llevo como ministro de Seguridad”.
En la conversación previa, también se habían producido acercamientos como por ejemplo, un tramo en el que Bullrich valoró los posicionamientos del ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires frente a casos como el de Chano Charpentier. "Pensar la seguridad desde el servicio que se brinda y no desde las teorías del derecho penal. Si tenés menos delito, brindás mejor servicio. Si sos firme con el delincuente, también lo hacés. Lo mismo sucede si tenés jueces que responden bien, si combatís el narcotráfico. Escuché a Berni hablar de la Taser, es una cuestión práctica. No es ideológica. La usan 107 policías del mundo. Es práctica. Entonces si miramos algunas cosas desde la práctica y no tanto desde la teoría, encontramos que en general ninguna de las teorías del derecho penal demostró demasiado", dijo.
Berni, por su parte, recogió el guante en este terreno y dijo: "Respeto mucho a la señora Bullrich; primero, porque es una militante que dice lo que piensa. La gran mayoría de las veces no lo comparto. No quiere decir que esté bien ni mal, no creo en la verdad absoluta. Nunca me arrogo la potestad de pensar que soy el dueño de la verdad".
Respeto mucho a la señora Bullrich; primero, porque es una militante que dice lo que piensa. La gran mayoría de las veces no lo comparto. No quiere decir que esté bien ni mal, no creo en la verdad absoluta", Sergio Berni.
Sin embargo, Berni aclaró que esa coincidencia es sólo desde la gestión, "desde la teoría, tenemos visiones totalmente distintas. No quiero faltar el respeto, pero tengo un camino de coherencia política. Transité mis 35 años de militancia política siempre en el mismo lugar, manteniendo los mismos valores, equivocadamente o no. Puedo resistir cualquier archivo de aquí a 35 años para atrás. Recuerdo a Patricia pasearse con un cartel en cámara allá por 2003 en la campaña para jefa de Gobierno, ¿no, Patricia? Ese cartel decía: “Macri corrupto”; “Macri ladrón”; “Macri devolvé la plata que robaste”. De pronto, convirtió a Macri en una especie de ídolo. Esas son las cosas que por ahí nos diferencian".
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