En medio de la crisis interna del Gobierno nacional, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner llamó por teléfono al ministro de Economía, Martin Guzmán, para aclararle que no pidió su renuncia.
Hace meses ya se había especulado con un paso al costado del ministro de Economía debido a un cruce con un funcionario ligado al kirchnerismo más duro.
Según dejaron trascender fuentes cercanas a la vicepresidenta, CFK habló por teléfono con Guzmán para decirle que ella no quiere su "cabeza", como se había especulado. Habrían quedado en tener otra conversación más larga en otro momento. Esta tarde, previo a los anuncios masivos de disposición de renuncia, el ministro de Economía había reconocido a la ex presidenta en el acto en el que se anunció la nueva ley de hidrocarburos.
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