Leonardo Boto, intendente de Luján perteneciente al Frente de Todos, decidió impedir la tradicional peregrinación a caballo a la Virgen de Luján. Desde el municipio argumentan que es meramente una "reconfiguración" de la fiesta, para adecuarla a la pandemia, garantizar la seguridad, y evitar el maltrato hacia los caballos. La cabalgata se realizó por primera vez en 1945, y la tradición solo se interrumpió el año pasado, debido al Coronavirus.
Los centros tradicionalistas que organizan el evento, los llamados Círculos Criollos "El Rodeo" y "Martín Fierro", se mostraron en desacuerdo con la medida. Rodolfo Fernando Asín, presidente de la primera de estas organizaciones, le dijo a La Nación: "Seguiremos luchando para que esto no muera. No vamos a arrear la bandera de la peregrinación". Sobre las preocupaciones del intendente, comentó que en los últimos años se sumaron personas que "no eran del palo". Estos fueron en sus carros, con sus animales, presuntamente, en malas condiciones.
Asín planteó: "No nos pueden coartar la libertad de culto. Hemos tenido reuniones previas con funcionarios municipales pero el intendente nunca participó". Según sus declaraciones, ellos les explicaron a los funcionarios municipales "como solucionar las cuestiones de seguridad y sanidad". Aún así, no los habrían escuchado y la prohibición se mantuvo. Desde la intendencia explicaron que toda la festividad se "ha reconvertido". Por lo tanto, el desfile "se va a realizar en una fecha a programar".
Asín comentó que pedirá una audiencia con Axel Kicillof y el arzobispo Jorge Scheinig, de la zona Mercedes-Luján, con el objetivo de que se realice el evento. "Vamos a buscarle la comba al palo y darle una solución a este tema que nos tiene muy mal".
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