La ola de calor provocó un nuevo colapso del sistema interconectado y dejó sin energía eléctrica a miles de ciudadanos. Por ello, muchos empezaron a evaluar la situación con una mirada de largo plazo, considerando la posibilidad de que estemos frente a una transformación estructural de la forma de generar y consumir energía, y no ante una eventualidad.
En este sentido, el ingeniero Ariel Mesch aseguró que la instalación de un panel solar asoma como una alternativa cada vez más atractiva para los usuarios que no quieren sufrir las consecuencias de los cortes. "La penetración de los paneles solares en la ciudad es algo relativamente nuevo que empezó en 2017, cuando los paneles alcanzaron una tecnología que permitió bajar los precios", dijo.
La penetración de los paneles solares en la ciudad es algo relativamente nuevo que empezó en 2017, cuando los paneles alcanzaron una tecnología que permitió bajar los precios. (Ariel Mesch, ingeniero)
En conversación con Radio Con Vos, Mesch explicó que el crecimiento de este mercado también va de la mano con "la ley de generación distribuida de 2018, que le permite a los usuarios particulares que tienen un medidor, generar, consumir su propia energía y vender los excedentes a la red".
Aunque dijo que esto, en sí mismo, no es un negocio rentable, sí genera un diferencial clave en momentos de apagón. "Se es muy exigente con que se tiene que ganar plata, pero no se considera la diferencia que genera tener energía en momentos en que los demás no tienen", dijo.
Mesch explicó que instalar un panel solar puede salir desde 270 mil pesos hasta 500 o 600 mil pesos, si se hace con un sistema de baterías. Una vez hecho, eso sí, el usuario se olvida de la cuenta de la electricidad. "Me ahorré el 100%. Ahora me toca pagar 3 pesos a fin de mes. Aunque no es un retorno de inversión, a largo plazo sí es significativo y además genera un confort y seguridad que los usuarios necesitan. Yo estoy instalando porque hay conciencia de que habrá una creciente necesidad", dijo.
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