El duelo entre los Washington Wizards y los Brooklyn Nets fue escenario de una jugada nunca antes vista en el mundo de la NBA.
El equipo de Brooklyn ganaba 109 a 103 y faltaban 5 minutos para que terminara el partido. En un ataque de los Wizards, el asistente David Vanterpool interceptó un pase que iba directamente hacia Kyle Kuzma y perdieron la pelota.
La jugada, que debería haber sido sancionada a favor de los Wizards con una posible falta técnica, pasó desapercibida para los ojos de los jueces.
Pese a los reclamos de los propios jugadores, la acción continuó y el alero de los Wizards realizó una falta para evitar el contraataque de los Nets. Los árbitros no se percataron de esta situación y decidieron continuar con el juego.
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En la conferencia de prensa, Kuzma explotó de la bronca al no entender por qué no sancionaron la falta antideportiva: “¡Es una mierda! Los entrenadores no deberían poder levantarse. Todos estaban de pie, incluido Steve Nash, que bloqueaba la vista del árbitro”.
La jugada, que debería haber sido sancionada a favor de los Wizards con una posible falta técnica, pasó desapercibida para los ojos de los árbitros. Una situación poco común en la NBA.
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