Hoy se celebra el día del Himno Nacional argentino en honor a la canción patriótica compuesta con versos de Vicente López y música de Blas Parera, que fue aprobada como símbolo patrio el 11 de mayo de 1813 por la Asamblea del Año XIII.
La “Marcha patriótica”, como originalmente fue denominada, pasó a llamarse luego “Canción patriótica nacional”, y posteriormente “Canción patriótica”. En 1847 una publicación oficial la denominó “Himno Nacional Argentino”, nombre que conserva hasta hoy.
Después de ser aprobado, se interpretó el himno por primera vez de manera pública en la casa de la aristócrata Mariquita Sánchez de Thompson quien entonó los primeros acordes. Según relató Lucio Vicente López, nieto del autor, el Himno Nacional fue escrito en la segunda habitación de la casa de Perú 295, en la ciudad de Buenos Aires, “sobre una mesita de caoba de abrir y cerrar, comprada por la familia López a oficiales de Whitelocke en las invasiones inglesas”.
La letra de la primera versión del himno era marcadamente independentista, acorde con el espíritu de la época y duraba 20 minutos. En 1924 fue abreviada a su duración actual, de 3 minutos 30 segundos. Los debates sobre la letra y música que había que utilizar se mantuvieron durante años hasta que el 24 de abril de 1944 el decreto 10.302 puso fin a las disputas y dispuso como oficial los versos, ritmo y armonía que conocemos hasta hoy.
Desde entonces, el Himno Nacional acompaña la historia de la Argentina y, a la vez, ayuda a representarla. Hoy suena en las escuelas, las fiestas patrias, actos públicos y eventos culturales y deportivos, como el canto de una Nación que consagra su libertad.
En 1990, Charly García compuso una versión del himno que incluyó en su disco "Filosofía Barata y Zapatos de Goma" y que pronto se convirtió en parte de su repertorio habitual en conciertos.
La versión del músico, sin embargo, tuvo sus detractores y su exclusión de las radios fue demandada por dos ciudadanos, que la interpretaron como un ultraje a la versión oficial. Ese mismo año, sin embargo, el juez Nicolás Blandi determinó que el delito era inexistente y exculpó a García.
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