La fiscalía acusó a Lucy Letby, de 32 años, de ser una "presencia malévola constante" en el hospital Countess of Chester, a cuatro horas de la capital del Reino Unido, en un caso que lleva años horrorizando al país europeo. Letby se declaró inocente.
El fiscal Nick Johnson explicó a los jurados que en el hospital se registró un aumento significativo de muertes y "colapsos catastróficos" en la unidad neonatal de la enfermera durante 2015 y 2016, según Associated Press.
Este aumento de las muertes o el grave deterioro de los bebés coincidió con el horario de los turnos de Letby, aún cuando la cambiaban de turno. Si trabajaba por las noches, esos incidentes aumentaban en ese turno y cuando fue trasladada a un horario diurno, aumentaron allí, explicó Johnson.
A veces, bebés que habían estado enfermos pero que luego se habían recuperado, de repente se deterioraban sin razón aparente.
Nick Johnson, fiscal de la causa
La enfermera neonatal está acusada de inyectar aire e insulina a los recién nacidos. "Bebés que no habían sido inestables en absoluto se deterioraron de repente", explicó el fiscal y añadió: "A veces, bebés que habían estado enfermos pero que luego se habían recuperado, de repente se deterioraban sin razón aparente".
Creen que la primera víctima fue un bebé prematuro asesinado en 2015 un día después de haber nacido. Si bien la autopsia no pudo determinar la causa de su muerte, tenía una "extraña decoloración" en su piel, detalló Johnson.
Un experto que estudió el caso sostuvo que la causa más probable fue una inyección de aire en el torrente sanguíneo "por alguien que sabía que iba a causar un daño importante". La hermana gemela de ese bebé sufrió niveles de oxígeno bajos 28 horas después de la muerte de su hermano, pero llegaron a reanimarla.
Hubo varias muertes que se atribuyeron a causas naturales, ya que recién en 2017 se alarmaron por que los casos fueran consecutivos y denunciaron en la policía. La revisión de las pruebas sugirió que alguien de la unidad neonatal envenenó a dos niños con insulina, explicó el fiscal. Ambos sobrevivieron porque los médicos llegaron a asistirlos.
Sin embargo, Letby era la que estaba trabajando en el hospital del Reino Unido durante ese turno. Johnson incluso aseguró que cuando ella fallaba en el asesinato de uno de los recién nacidos, volvía a intentarlo. Con un bebé, según el fiscal, llegó a intentarlo tres veces.
La directora ejecutiva del Countess of Chester Hospital NHS Foundation Trust, Susan Gilby, encargada de gestionar el centro, le escribió a The Washington Post en un correo electrónico: "A medida que el juicio comienza, apoyamos y respetamos plenamente los procesos judiciales y, como tal, no haremos más comentarios en esta etapa. Nuestros pensamientos siguen estando con todas las familias implicadas".
La policía de Chester detuvo e interrogó a Letby tres veces antes de que fuera acusada formalmente en noviembre de 2020. El juicio todavía podría durar meses.
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