El paciente de 44 años estaba internado en terapia intensiva en la Ciudad de Buenos Aires desde septiembre y tenía diagnosticado VIH sin tratamiento. Según el Ministerio de Salud, el fallecido residía en la provincia de Buenos Aires y desde el 17 de septiembre estaba ingresado en un hospital público de la Ciudad.
Durante la internación, el hombre fue asistido con respiración artificial hasta el martes 22 de noviembre cuando perdió la vida por un shock séptico. En su estadía en el hospital también identificaron que tenía infecciones como herpes, citomegalovirus, sífilis y neumonía.
La cantidad de contagiados con mpox, antes conocida como "viruela de mono" o viruela símica, era de 895 hasta el 22 de noviembre, según el Boletín Epidemiológico Nacional (BEN) publicado hoy. En el 98,5% de los casos las personas contagiadas son hombres y la edad promedio es de 35 años, con un mínimo de 10 y un máximo de 78.
Según el BEN, "la población más afectada continúa siendo la compuesta por hombres que tienen sexo con otros hombres y con el antecedente de relaciones sexuales con múltiples parejas sexuales".
El Ministerio de Salud confirmó casos en 15 jurisdicciones y sospechosos en 23. La mayoría sigue concentrado en la región Centro, en grandes conglomerados urbanos: el 66,4% de los casos confirmados se registraron en residentes de la CABA y junto con las provincias de Buenos Aires y Córdoba, concentran el 94,9%.
¿Cómo se transmite la viruela símica (o mpox)?
Esta enfermedad puede transmitirse de persona a persona o por contacto:
- Por contacto cercano con lesiones, gotitas respiratorias y materiales contaminados, como toallas y ropa de cama.
- Cualquier persona que tenga contacto directo (cara a cara, piel con piel, boca con boca, boca con piel), incluido el contacto sexual, con una persona infectada puede contraer la viruela símica o mpox.
- El virus también puede transmitirlo una embarazada al feto desde la placenta y cualquier persona infectada a su bebé durante o después del nacimiento a través del contacto piel con piel.
Las personas con inmunidad disminuida tienen mayor riesgo de padecer formas graves. También aquellos que intervienen estrechamente con alguien contagiado, incluidos los trabajadores de la salud, los miembros del hogar y las parejas sexuales, corren un mayor riesgo de infección.
Más Información
