Por primera vez en las nueve jornadas del juicio por el asesinato de Fernando Báez Sosa, uno de los ocho acusados sorprendió y rompió el pacto de silencio que mantuvieron los asesinos hasta el momento.
“Quiero aclarara algo, ¿lo hago? Yo no estaba ahí”, lanzó Luciano Pertossi hace instantes cuando los peritos apuntaron hacia él en el Tribunal Oral Criminal número 1 de Dolores. Según describen los periodistas que presencian el juicio en la sala, Pertossi se mostró muy nervioso y ansioso por interrumpir la declaración de uno de los peritos que exponía ese momento.
"Deducí (sic) que decían que yo venía de ese lado -en referencia a una zona puntual de la escena del crimen- y yo no estaba ahí"
Tras el pedido para declarar, se produjeron una serie de movimientos en la sala: los peritos que estaban exponiendo debieron retirarse a un lugar contiguo y Luciano Pertossi dejó la silla que habitualmente ocupa junto a los acusados y lo ubicaron al frente en la silla en la que declaran los testigos e involucrados en el juicio.
“¿Dónde estaba?” le preguntaron los fiscales. Pero la breve aclaración fue todo lo que Pertossi estuvo dispuesto a declarar. “No te voy a responder”, replicó. El rugbier solo intentó defenderse y desmentir a los peritos pero no aportó ni dijo nada más.
Cuando le repitieron la pregunta, el acusado repitió "No te voy a responder". Ante la insistencia de los fiscales le preguntaron "¿Quién es la persona de negro que está atrás del auto?”, Pertossi se mostró aún más tajante: “No quiero responder ninguna otra pregunta, no se esfuercen porque no voy responder más nada”.
La desesperación de Luciano Pertossi fue porque hasta el momento a él se lo indicaba en la escena pero no pegándole a Fernando como se lo ve. Hasta el momento solo lo indicaban como un arengador y uno de los que hacía el cerco para que los amigos y las personas que estaban ahí no pudieran ayudar a Fernando.
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