PSG jugó un partido muy malo, pero ganó gracias a la magia de Lionel Messi. El equipo de la capital francesa se puso arriba 2-0 rápidamente, pero después del Lille le metió tres tantos y se lo dio vuelta. Sin embargo, sobre el final Kylian Mbappé empató el encuentro y a los 94 minutos el astro argentino convirtió un golazo de tiro libre y salvó al elenco de Galtier.
El mejor jugador del mundo generó la falta cerca de la medialuna con una linda gambeta y después agarró la pelota decidido. Era su momento. Leo le pegó al palo del arquero, la redonda se estrelló en el poste y entró de forma inatajable para el arquero.
Messi tuvo un partido discreto, participó poco del juego y no se pudo asociar con sus compañeros. Sin embargo, el campeón del mundo siempre tiene tiempo para frotar la lámpara y salvó al PSG de una nueva decepción. Es que no ganaba desde el cuatro de febrero, frente a Toulouse y había acumulado tres derrotas consecutivas.
Ahora, el capitán de la Selección Argentina intentará seguir mejorando su nivel para conseguir el objetivo principal de dar vuelta la serie frente al Bayern Múnich, por octavos de final de la Champions League.
A pesar de la victoria y el golazo de Leo, PSG terminó el partido de hoy con un gusto agridulce. Es que se lesionó Neymar y todavía no se sabe qué tiene ni cuánto tiempo deberá recuperarse. Por este motivo, preocupa y mucho, ya que, podría perderse el partido con el elenco alemán.
El brasileño se dobló el tobillo, después de caer mal y lo sacaron del campo de juego en camilla. Si bien se cree que puede ser un esguince, deberá hacerse estudios para determinar la gravedad de su lesión. Mientras tanto, en París están expectantes para ver si puede jugar en Champions.
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