A casi 40 días de su muerte, la Justicia accedió a los resultados de los estudios toxicológicos a las muestras extraídas del cuerpo de Emmily Rodrigues, la joven brasileña que murió en un confuso episodio tras caer del departamento del empresario Francisco Sáenz Valiente.
Varias testigos de esa noche coincidieron en que Emmily consumió marihuana, cocaína y el compuesto tusi, una mezcla de drogas sintéticas indeterminada con un fuerte efecto euforizante. Ahora, los estudios toxicológicos, practicados por el Cuerpo Médico Forense, revelaron que efectivamente la joven tenía presente rastros de cocaína, marihuana, alcohol, ketamina y MDMA.
Por otra parte, los hisopados en busca de fluidos sexuales dieron negativo. En su apelación, los fiscales insistieron que fue asesinada en una escena “sexualizada”, entre lencería y juguetes eróticos. Se encontraron dos preservativos en el lugar, pero no se halló sangre o semen en ellos. La autopsia también descartó lesiones compatibles con un abuso sexual.
Mientras tanto, la causa por la muerte de Emmily Rodrigues se encuentra en una encrucijada. Los fiscales Santiago Vismara y Mariela Labozzetta acusan a Sáenz Valiente por el delito de femicidio y de facilitarle los estupefacientes que llevaron a su muerte. El juez Martín Del Viso aplicó la falta de mérito para el empresario, al asegurar que los fiscales aún no pudieron establecer cómo murió la brasileña.
Esta decisión fue apelada y deberá ser resuelta por la Sala VI de la Cámara Criminal y Correccional la semana próxima. Mientras tanto, el empresario y su defensa, encabezada por el abogado Facundo Orazi junto a Rafael Cúneo Libarona, sostienen que la joven brasileña tomó las drogas por propia voluntad.
Los fiscales aseguraron, también, que “en el lugar se encontraron tres jeringas –una, con líquido a determinar”. Un análisis forense de los audios de los llamados al 911 de Sáenz Valiente reveló que una muje grita: “¡Me pincharon!”. Sin embargo, no se encontraron marcas de punción en su cuerpo. la Justicia dispuso una pericia del área biológica de laboratorio químico, que realizará la Policía porteña. La jeringa será analizada en busca de sangre humana, para determinar si Emmily, efectivamente, fue inyectada.
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