Marcos Rojo se está recuperando en Miami, Estados Unidos de su lesión muscular en el recto anterior derecho. En este sentido, está con su preparador físico Julio César Murillo haciendo trabajos para intentar llegar a los octavos de final de la Copa Libertadores, frente a Nacional de Uruguay.
Ayer, Murillo relató los trabajos que está haciendo el capitán de Boca, lo que produjo el enojo de Jorge Batista, el médico del Xeneize que operó al central después de su lesión ligamentaria a fines del año pasado.
“Involucrando componentes muy simples: la mejora del control motor, con estimular la desaceleración, la práctica de aterrizaje de bajo impacto, con introducir el contacto con el suelo después de una lesión, con desarrollar la tolerancia en los tejidos para impactar y en la fuerza unipodal”, subrayó el PF, en una publicación que hizo en su cuenta de Instagram, con fotos del exfutbolista del Manchester United.
Batista publicó una captura de pantalla del posteo de Murillo y lo trató de mentiroso. “Hoy a la tarde temprano voy al cine. Me recomendaron ir a ver Pinocho”, señaló, haciendo referencia a que el preparador físico de Rojo está faltando a la verdad.
Después de eso, Murillo se refirió a los dichos del médico de Boca y negó sus afirmaciones. “La verdad es que no vi nada. Yo hablé con el kinesiólogo de Boca, Leonardo (Betchakian). No es mentira porque los trabajos que hacemos hacen referencia a eso que yo publiqué. Hablé solamente con Rojo y Leonardo, que trabaja en Boca", recalcó, en diálogo con TyC Sports.
Finalmente, dijo que el dos veces mundialista venía con una molestia en el gemelo izquierdo, un mini desgarro. “Intentamos ayudarle a que se le fuera el dolor, él tenía algunos días sin entrenar por la lesión. Aquí hemos trabajado en varios componentes que para mí son necesarios para su recuperación", concluyó.
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