En una entrevista, el actor Pablo Alarcón contó que se mantiene trabajando a la gorra en plazas, porque, a los 76, y sin papeles en teatro ni en televisión, tuvo que rebuscárselas y probar esta nueva forma de trabajo "para poder vivir".
"Necesidad económica es obvio que tengo, como todo el mundo, salvo, 10, 20, o 100, soy muy pocos los millonarios... el dinero no es que me preocupa, lo necesito directamente, 17 mil pesos de gas me llegó, no tengo un sueldo, yo tengo mi jubilación de 70 y pico de mil pesos, que no me alcanza para un carajo...", contó el Pablo Alarcón en diálogo con radio La Red, después de que se viralizaran sus fotos actuando a la gorra en las plazas de la Ciudad de Buenos Aires.
Además, indicó que él trabaja desde su vocación y que nunca lo hizo por la plata, y sobre trabajar en la calle, dijo, "me costó pero no por vergüenza, por frío... tenía mucho frío, hasta que dice un día 'no me importa' y salí, y hoy estoy feliz de haberlo hecho, siento que hago lo que me corresponde". En la entrevista, Alarcón recordó también uno de los textos que actúa en la plaza que está al lado del Centro Cultural Recoleta, donde adelantó que está haciendo los shows, acompañado de dos músicos.

El texto se llama "Discurso de la servidumbre voluntaria", en el que recita, "nos roban, nos están robando, hay muchos que están contentos, a estos gobiernos no los defienden los ejércitos, los gobiernan cuatro o 5 corruptos...", declamó en una conversación con Pablo Vilouta en radio La Red.
Sobre la recepción que tuvo su trabajo a la intemperie y a la gorra, contó que sus colegas le decían que se estaba rebajando: "la gente me decía que eso era rebajarse, exponerse demasiado. Yo estoy contra la corrupción. Admito un gobierno equivocado, pero no un gobierno ladrón. Y no puedo admitirlo mientras haya gente con necesidades”, a la vez que reveló: “Yo no amo a ningún candidato, yo voy a votar a conciencia".