A siete años y medio de prisión fue condenado Omar Alfredo Carranza, por acoso y violencia de género, luego de que se comprobara que envió 267 mails a su expareja en 50 días y que se presentó en su hogar para amenazarla, cuando ya tenía una medida de restricción.
La víctima, con quien estuvo en pareja durante seis años, lo había denunciado y la justicia dispuso una perimetral que el hombre traspasó sucesivamente. En una ocasión, incluso, la mujer debió oprimir un botón de alerta que le habían otorgado de manera preventiva.
En aquel momento, la fiscal Cecilia Cardinalli decidió imputarlo por hechos como los ocurridos la tarde del 21 de septiembre de 2021, o la del 5 de marzo de 2022, cuando fue a tocarle timbre a la víctima para que saliera a recibirlo, en la ciudad de Santa Fe, y la mujer tuvo que llamar a la Policía.
Pero pese a las advertencias y las medidas establecidas, Carranza siguió acosando a la víctima. Entre el 8 de abril y el 31 de mayo de 2022 le envió desde diferentes correos electrónicos 267 mails. Cuando la mujer denunció, la Justicia determinó que tenían como fin “amedrentar, atemorizar e intimidar”, de acuerdo a la prensa local.
De esta manera, en el juicio oral, finalmente, la jueza Paola Aguirre lo condenó a siete años y medio de prisión por el acoso y le adjudicó “desobediencia judicial en concurso real con amenazas coactivas” en el marco de denuncias previas por violencia de género.
En total fueron 270 desobediencias que incluyeron lesiones leves, amenazas coactivas y tenencias de arma de fuego en contra de la víctima. Los siete años de condena unifican los delitos por acoso vía mensajes (cuatro años y seis meses), más la condena anterior de tres años de prisión condicional.
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