El Gobierno aumentó los sobsidios a las empresas de colectivos en un 39% dada la decisión de mantener congelado el precio del boleto en el AMBA. La medida busca destrabar el conflicto salarial que mantiene la Unión Tranviarios Automotor (UTA) con las empresas.
Con dicha medida, el Ministerio de Economía consignó un nuevo recálculo de la estructura de costos en el sistema con los de precios de abril. La decisión tiene como fin que las líneas de colectivo puedan cumplir con el último acuerdo salarial que firmaron con la UTA.
El mismo consiste en dos sumas no remunerativas de $250.000 en mayo y junio, ante la creciente amenaza del sindicato con iniciar un paro. De hecho, el mes pasado la UTA había realizado un cese del servicio de 24 horas en reclamo del cobro de los haberes no remunetarivos.
Sin embargo, el conflicto entre la UTA y las empresas, el 21 de mayo habrá una nueva audiencia entre las cámaras empresariales UTA para intentar cerrar un acuerdo. Los trabajadores buscarán un aumento que en el salario básico, que en este momento se ubica alrededor de los $700.000.
De todas maneras, el congelamiento de la tarifa de colectivos afectó los ingresos de las empresas, a tal punto que en abril los ingresos tarifarios solo alcanzaban a cubrir el 30% del costo del sector, según estimó la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA).
Además, la AAETA detalló que para mayo esperan que la cobertura se ubique en el 24% y señalaron que los ingresos de los operadores cayeron un 11% en términos reales con respecto al año anterios. Dichas pérdidas se reflejan en la caída de la calidad del servicio.