Luego de las críticas que lanzó Cristina Kirchner al Gobierno por la falta de gas y poniendo la lupa spbre el superávit fiscal "trucho" que llevan como bandera en la Casa Rosada, el vocero presidencial, Manuel Adorni, le respondió con ironía: "Cuando uno le habla a una pared, es perder el tiempo”.
Cuando Adorni fue consultado por estas declaraciones, afirmó que "corre por cuenta de ella lo que dice sobre el superávit". "Ya hemos explicado más de una vez los números, que además son públicos. Hay una obsesión, porque como no lo hicieron ellos tampoco lo podemos hacer nosotros. Que vaya y vea los números, no sé en qué se basa para decir eso, desconozco cuál es el sustento numérico que está utilizando”, sostuvo el vocero.
Sobre la crisis del gas, acotó: “El secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, ha dado una magnífica explicación en las redes sociales. Es bastante extensa. A veces uno pierde el tiempo explicando a alguien que no le interesa, no le importa esa explicación y no suma nada; porque cuando uno le habla a una pared, es perder el tiempo”.
Más allá de la chicana, siguió: “Los pagos a los contratistas del gasoducto Néstor Kirchner están al día. Con respecto a las obras del primer tramo y las plantas compresoras, debieron finalizar en septiembre de 2023, cosa que no ha ocurrido".
"Este gobierno regularizó los pagos que eran deuda del gobierno anterior por $30.000 millones y destinó recursos por otros $47.000 millones en la fase de terminación. En el gasoducto norte el gobierno anterior dejó sin adjudicar el primer tramo y sin licitar los otros dos; esta gestión los licitó y adjudicó la obra, a la que ya el Gobierno destinó más de $150.000 millones”, agregó Adorni.
Por último, el vocero advirtió que “se debió asumir una deuda que dejó el gobierno anterior con Bolivia por 244 mil millones de dólares por la importación de gas”. “Los intereses de esa deuda fueron de 21,8 millones de dólares que por supuesto, pagamos entre todos. Vos, yo y la doctora Fernández de Kirchner”, cerró.