La Compañía Nacional de Abastecimiento de Brasil (Conab) dio a conocer su estimación de producción de granos, que alterna buenas y malas, dependiendo el cultivo y el impacto del clima.
En detalle, esta última proyección de junio marca una producción de granos para el ciclo 2023/2024 de 297,54 millones de toneladas, un volumen 7% inferior al obtenido en la campaña anterior, lo que supone una merma de 22,27 millones de toneladas.
La estimación actual también queda muy por debajo de la proyección inicial que era de 317,5 millones de toneladas y por debajo del récord histórico del país vecino que fue al campaña 2022/23 cuando cosechó 322,5 millones de toneladas.
La principal razón que explica esta caída de producción, tanto de las expectativas como de la realidad, es el efecto de las condiciones climáticas sobre el sur del área agrícola de Brasil, que se vio afectado por lluvias históricas.
Las buenas y malas de los granos
La Conab señaló que si bien la caída es una realidad, a medida que avanza la cosecha de granos se encuentran mejores resultados en algunos cultivos, sobre todo en maíz, algodón y porotos (frijoles).
En relación al informe previo de mayo, la estimación aumentó 2,1 millones de toneladas entre estos tres cultivos, pero se destaca el maíz, que alcanzaría una producción total en Brasil de 114,14 millones de toneladas.
El informe, que se puede descargar aquí, también señala que comenzó la siembra del trigo con un 46,8% del área total estimada, que superaría las 3 millones de hectáreas, pero el dato más saliente es que proyectan una producción de 9 millones de toneladas con rindes de 2.945 kg/ha.
Asimismo, la Conab advierte que en Rio Grande do Sul, el mayor estado productor de cereales de invierno, "los trabajos se ven obstaculizados por condiciones climáticas aún no favorables debido al exceso de humedad, que imposibilita el manejo de las áreas para la siembra".