Un barco pesquero ilegal que navegaba a 370 kilómetros al este de las Islas Malvinas se hundió en el Mar Argentino. Según los primeros reportes, 6 de los 27 tripulantes murieron. La embarcación llamada Argos Georgia, de 54 metros de eslora y 13 de manga tenía bandera de la isla de Santa Elena y su tripulación se construía de varias nacionalidades: 10 españoles, 8 rusos, 2 uruguayos, 2 peruanos y 5 indonesios.
Las primeras informaciones sobre esta tragedia fueron difundidas esta mañana por el gobierno de las Islas Malvinas, que permanecen bajo dominio británico. El pesquero se dedicaba a la pesca de merluza negra y el accidente se habría producido por una rotura en el casco de la embarcación.
“Tras un incidente ayer por la tarde a unas 200 millas náuticas al este de Stanley que provocó inundaciones incontroladas, 27 miembros de la tripulación del barco pesquero Argos Georgia fueron obligados a abandonar el barco poco después de las 4 PM, hora local, y los miembros de la tripulación se subieron a balsas salvavidas. El BFSAI A- 400M ‘Atlas’ fue el primer activo en la escena y pudo rastrear e informar la posición y la posición de las balsas salvavidas”, informó la administración de Malvinas en un comunicado.
Por año, el gobierno de las Islas entrega cientos de licencias y cupos de pesca (ITQB, Individual Transferable Quota), por un plazo de 25 años. Por este motivo, hay cerca de 120 barcos autorizados a pescar dentro de la zona de exlusión, a pesar de las quejas que viene presentando Argentina los últimos años ante diversos organismos internacionales.
José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores español, está en “contacto permanente” con sus consulados en Buenos Aires y Londres para seguir de cerca la operación de rescate a los tripulantes del pesquero. Así lo confirmó el propio Albares en conferencia de prensa.
Esa zona de búsqueda está por determinación de la Organización Marítima Mundial (OMI) bajo la responsabilidad de la Argentina y aceptación de los británicos. El operativo está siendo coordinado por Argentina pero las tareas de campo las llevan a cabo los habitantes de las Islas.
Gran Bretaña y la OTAN aportaron naves para el operativo de rescate que estuvieron durante toda la noche del lunes intentando salvar a los tripulantes que naufragaban en balsas. Sin embargo, las malas condiciones climáticas hicieron imposible el operativo. El buque patrulla FPV Lilibet de los kelpers y otros dos barcos pesqueros de la zona también se sumaron a la misión.
Según las autoridades británicas “un helicóptero de búsqueda y rescate (SAR)” de su base intentó ayudar a los náufragos pero no tuvo éxito y regresó a la base “para repostar combustible antes de un segundo intento, pero el clima empeoró aún más y las operaciones SAR de ala giratoria fueron suspendidas. A partir de esta mañana, las condiciones climáticas significan que el área de búsqueda está fuera de los límites para las operaciones SAR con helicópteros, pero la situación se está revisando periódicamente con miras a reanudar las operaciones lo antes posible”.
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