Un funcionario de Nicolás Maduro anunció que están tramitando la solicitud de una orden de captura contra Javier Milei, su hermana Karina y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, a quienes les abrieron “una averiguación” por el “robo” del avión venezolano-iraní que estuvo retenido en Buenos Aires desde junio de 2022 y fue enviado a Estados Unidos en febrero de este año.
El avión en cuestión había quedado retenido en Ezeiza por tener tripulantes vinculados a la Guardia Revolucionaria iraní y se transformó en una política de estado para el régimen venezolano que presionó para que lo devuelvan a su país, aunque sin éxito.
De acuerdo con lo que expuso el fiscal chavista Tarek William Saab, el Gobierno llevo a cabo el “robo y desmantelamiento” de la aeronave, por lo que a Milei se le adjudican los delitos de robo agravado, privación ilegítima de libertad, interferencia ilícita, inutilización de aeronave y asociación para delinquir, entre otros.

De todas maneras, el anuncio no es casual: llega luego de que los fiscales argentinos Carlos Stornelli y José Agüero Iturbe reclamaran que se ordene la indagatoria y captura de Maduro y su mano derecha, Diosdado Cabello.
Según Maduro, el avión de carga "cumplía importantes funciones humanitarias para Venezuela, países del Caribe y de África". La realidad es que el venezolano apunta a seguir polarizando con Milei, aunque al libertario no parecería disgustarle.