Jorge Lanata entró al quirófano por cuarta vez en una semana. Su salud continúa delicada después de las sucesivas intervenciones a las que tuvo que someterse por una isquemia intestinal, una peligrosa afección que limita el flujo sanguíneo en el intestino.
Tras la cuarta cirugía, realizada este jueves, el parte médico de Lanata respecto de su estado de salud trajo tranquilidad: "La cirugía se realizó en un contexto de completa estabilidad hemodinámica", dice el documento firmado por los doctores Oscar Mazza, Jefe del Servicio de Cirugía General y Susana Bauque, Jefa del Servicio de Terapia Intensiva del Hospital Italiano.
La información fue dada a la prensa por una de sus hijas, Bárbara Lanata. En el escrito, los especialistas informan que durante la cuarta cirugía "se llevó a cabo la reconstrucción del tránsito intestinal sin complicaciones intraoperatorias. Además, se realizó el cierre definitivo de la pared abdominal".
Respecto de su estado de salud luego de la operación, las autoridades del Hospital informaron que se encuentra estable y está "sin requerimiento de drogas vasoactivas y con la función renal estable", pero que, para enfrentar el dolor del posoperatorio, se le suministran medicamentos analgésicos "para el control del dolor y sedación, y continúa con ventilación mecánica en modalidad de soporte".

Lanata, mientras está complicada su salud, está inmerso en conflictos entre su esposa, Elba Marcovecchio, sus hijas y su expareja, Sara Stewart Brown. Este mediodía se conoció que Sara Stewart Brown, que había sido su pareja durante 30 años, revocó el poder que tenía Elba Marcovecchio.
Según detalló, lo hizo para revertir la decisión de cesantear a empleados que trabajaron con él durante más de 20 años. "El poder se usó para hacer cosas que él jamás hubiera hecho", señaló.