Minerva Foods se convirtió recientemente en la máxima empresa en exportación de carne bovina fresca y sus derivados en Sudamérica, tras recibir aprobación del Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE), para la adquisición de activos de Marfrig en Brasil.
La compañía completó así la adquisición de 13 plantas de procesamiento de animales bovinos y ovinos, así como un centro de distribución a su operación. La transacción había sido anunciada en agosto del año pasado, pero estaba sometida a la ley brasileña de competencia.
A partir de ahora, la empresa podrá faenar 22.536 cabezas/día, en 21 plantas en el mercado brasileño, al tiempo que avanza en la integración de las plantas de procesamiento de bovinos en Argentina, y otra de ovinos en Chile.
Con la compra, en la Argentina podrá faenar 5.978 cabezas/día, en las seis plantas que hay instaladas en el país, mientras que la faena ovina se incrementará hasta las 25.716 cabezas/día, en las cinco plantas ubicadas en los mercados de Australia y territorio chileno.
Minerva Foods y exportaciones
Con este movimiento, la empresa amplía el acceso a clientes internacionales, dándole más exposición a mercados como Norteamérica, Europa, Medio Oriente y Asia, e incluso convirtiéndose en el principal proveedor de vacuno de China, con el mayor número de plantas del sector habilitadas para exportar hacia el país asiático.
Cabe destacar que tanto Brasil como la Argentina son los principales socios comerciales de carne vacuna de China, uno de los mercados más importantes a nivel mundial por la cantidad de carne que demandan los asiáticos, aunque si hablamos de precios, el mercado europeo es quien manda.
Según informaron desde Minerva Foods "esta compra permite a la compañía maximizar su capacidad en el mercado global de proteína animal, minimizando riesgos y potenciando oportunidades, además de operar de manera más eficiente los ciclos productivos ganaderos en los distintos países del continente".
La firma además se convirtió en el segundo mayor productor de carne bovina de Sudamérica. La inversión de la compra fue de aproximadamente 1.520 millones de dólares.
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