El bajo nivel de los precios internacionales, el aumento de los costos y la presión fiscal sobre la soja presiona su rentabilidad, lo cual hace que los productores, cada vez más seguido, pidan por la eliminación de retenciones.
El discurso parece repetido, pero el valor actual de la oleaginosa impacta de lleno en los números que manejan los productores, con los márgenes cada vez apretados. De hecho, según un estudio realizado por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), los agricultores recibirían un 20% menos por su producción que el año pasado.
El principal factor que explica esto es la caída de los precios internacionales, que hoy se encuentran en niveles de 2020, rondado los US$ 360 la tonelada. Si a ese precio se le restan las retenciones, el precio que recibe el productor en Argentina es de US$ 260 por tonelada.

Si se toma en cuenta que la producción total esperada se ubicaría en torno a las 53 millones de toneladas, el valor de la cosecha sería de aproximadamente de US$ 13.786 millones, que restándole los costos de cosecha y comercialización da un total de US$ 9.632 millones, que es lo que recibirían los productores, técnicamente conocido como "valor en tranquera de la producción".
Ahora bien, si al precio “en tranquera” recibido por el productor se le sustrae el costo directo de producción (semillas, insumos y labores), se arriba al resultado bruto para el productor. Bajo el escenario planteado, para la nueva campaña 2024/25 éste se proyecta en US$ 223,8 por hectárea, un 20% por detrás del año inmediato anterior e incluso un 25% por detrás del promedio de los últimos cinco años.

Es por eso que la BCR sostiene que "con un partido que apenas comienza, esta contracción de los resultados proyectados, si bien se sostienen en terreno positivo, son una señal de alerta".
"La soja apenas se está sembrando en Argentina y aún debe atravesar su período crítico durante el verano, requiriendo una normalización de las condiciones atmosféricas para asegurar que los rindes igualen, al menos, su tendencia a largo plazo", agregó.
La campaña de soja
Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), el progreso intersemanal en la implantación de la oleaginosa fue de 16 puntos porcentuales (p.p.), permitiendo la cobertura del 35,8% de las 18,6 millones de hectáreas proyectadas para el cultivo.
"Al momento, las buenas condiciones de humedad superficial sobre gran parte del área agrícola han permitido la siembra de casi la mitad de la soja de primera proyectada para esta campaña, iniciando el ciclo de cultivo en óptimas fechas de siembra", apuntó la BCBA.
Asimismo, la entidad bursátil señaló que se reportan buenos logros en el stand de plantas, a pesar de casos puntuales relacionados con la calidad de la semilla y algunos episodios de escapes de malezas luego de las últimas lluvias.
Otro dato importante que arrojó el informe de la Bolsa porteña es que se inició la siembra de los primeros lotes de soja de segunda, principalmente sobre el núcleo norte y el centro-este de Entre Ríos.