La Comisión Nacional de Valores (CNV) absolvió a Leonardo Cositorto y a su empresa, Generación Zoe, de varios cargos relacionados con el incumplimiento de la ley del mercado de capitales. A pesar de que el empresario sigue preso en un penal de Corrientes por estafa y asociación ilícita, el organismo estatal determinó que no incurrió en infracciones bajo su regulación.
Tras investigar si Cositorto había realizado captación indebida de ahorro público o asesoramiento en materia de mercados, la CNV concluyó que ni él ni las empresas involucradas operaron con bonos, acciones u otros valores negociables, por lo que no tienen competencia para sancionarlo.
Aunque se reconoció que Cositorto mintió al afirmar que era dueño de una ALIC y tenía habilitación de la CNV, el hecho de no haber realizado operaciones con valores negociables lo exime de cualquier penalidad. “No nos cae bien Cositorto, pero no podemos sancionarlo por algo que no hizo”, afirmaron desde la CNV.

La resolución final, que absolvió a Cositorto y sus empresas, se tomó a pesar de la gran cantidad de testimonios de personas afectadas y el contexto del caso, que sigue siendo emblemático por la cantidad de víctimas de esquemas Ponzi relacionados con consejos y cursos de trading en redes sociales.
Desde la CNV aclararon que su decisión no implica que las acciones de Cositorto no puedan ser consideradas como delitos penales en el ámbito judicial. El organismo afirmó que se mantiene disponible para colaborar con la justicia en la investigación de los casos en curso.

Mientras tanto, Cositorto aprovechó la resolución para defender su inocencia en sus redes sociales, criticando a los medios que lo habían acusado y lamentando que, tras su absolución, no se le haya dado la misma cobertura.
Cabe recordar que Cositorto ya había sido intimado en octubre de 2021 por la CNV a cesar cualquier oferta de negociación con valores negociables, y que el organismo había emitido alertas a inversores en el ámbito internacional. El año pasado, la CNV abrió un sumario administrativo contra él.

El empresario tiene varias causas abiertas en distintas provincias y, tras la feria judicial, se reanudó el juicio por estafa en el Tribunal Oral Penal de Goya. Además, la fiscal Juliana Companys en Villa María, Córdoba, solicitó que se lleve a juicio oral la causa principal, en la que Cositorto y otros 26 imputados enfrentan cargos de asociación ilícita y estafas reiteradas contra cientos de personas. Según la investigación, el esquema funcionaba como un sistema piramidal de recaudación de fondos, disfrazado de una empresa legítima.