Los códigos QR se convirtieron en una herramienta cotidiana: pagamos en bares, sacamos turnos, accedemos a descuentos y hasta validamos estacionamientos con solo escanear uno. Pero, así como nos facilitan la vida, también se transformaron en el anzuelo perfecto para las estafas de los ciberdelincuentes. Con una simple movida, los ladrones pueden meterse en tu celular, vaciar tus cuentas y quedarse con todos tus datos.
¿Cómo te enganchan con el “QRshing”? El “QRshing” es una versión moderna del phishing: los delincuentes crean códigos QR falsos que, al ser escaneados, redirigen a sitios maliciosos diseñados para robar credenciales bancarias, datos personales y hasta instalar malware en el teléfono.
Según la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos, muchas de estas estafas aparecen en espacios públicos, pegadas en carteles, mesas de restaurantes o incluso en estaciones de servicio. También pueden llegar por mensaje de texto o mail, disfrazadas de avisos de bancos o servicios oficiales. El objetivo siempre es el mismo: hacer que la víctima ingrese información sensible sin darse cuenta.

Los riesgos de escanear un código QR trucho
El peligro principal de estas estafas es el robo de datos bancarios. Con un simple escaneo, los atacantes pueden acceder a cuentas de pago y realizar transacciones no autorizadas. Y si usás la misma contraseña en varias plataformas, el problema se agrava: tus otras cuentas quedan en la mira.
Pero la cosa no termina ahí. Algunas de estas estafas instalan malware en el celular, lo que permite a los delincuentes espiarte, registrar lo que escribís e incluso tomar control del dispositivo de forma remota. Así pueden acceder a fotos, contactos y mensajes privados, abriendo la puerta a extorsiones y fraudes aún más grandes.

¿Qué hacer si caíste en estas estafas?
Si ingresaste datos personales en una web sospechosa, lo primero es cambiar todas tus contraseñas y activar la autenticación en dos pasos en tus cuentas más importantes. Revisar los movimientos bancarios es clave: cualquier transacción que no reconozcas debe ser reportada de inmediato para evitar pérdidas mayores.
También es recomendable escanear el teléfono con un antivirus y, si es necesario, restablecer la configuración de fábrica para eliminar cualquier posible malware. En casos extremos, contactar a un especialista en ciberseguridad puede ayudar a mitigar los daños.

Estafas con código QR: cómo evitar que te vacíen la cuenta
Para no caer en este tipo de fraudes, las autoridades en ciberseguridad recomiendan tomar precauciones sencillas pero efectivas:
- No escanear códigos QR en espacios públicos sin verificar su origen. Si ves un código pegado en una mesa o un cartel, preguntá antes de usarlo.
- Desactivar la opción que abre enlaces automáticamente al escanear un código. Esto te permite ver a qué página te está llevando antes de ingresar.
- Utilizar aplicaciones de escaneo seguras y confiables. No uses cualquier app desconocida que pueda traer malware de regalo.
- Escribir manualmente la URL en lugar de escanear. Si recibís un código QR por mensaje o mail, buscá la web oficial antes de ingresar datos.
Protegé tu información antes de que sea tarde
Actualizar el sistema operativo y contar con un software antivirus de calidad es fundamental para prevenir ataques. Además, evitar el uso de redes WiFi públicas para realizar operaciones bancarias o ingresar datos sensibles reduce el riesgo de ser víctima de estas estafas. Por último, si recibís un código QR que no estabas esperando, no lo escanees.
Los códigos QR llegaron para quedarse, pero no todos son inofensivos. Con un poco de precaución y sentido común, podés disfrutar de su practicidad sin poner en riesgo tu seguridad. No te confíes: los delincuentes están al acecho y, en el mundo digital, un solo escaneo puede costarte todo.