Tras conocerse la decisión del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, de retirar a su país del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Argentina tiene previsto seguir esa misma línea. El Gobierno de Javier Milei evalúa retirarse de una gran cantidad de organismos internacionales, según trascendió desde Casa Rosada.
Por expresa directiva del Presidente, el encargado de abordar el tema es el ministro de Relaciones Exteriores, Gerardo Werthein. El canciller y sus colaboradores están analizando las implicancias legales del previsto retiro del país de distintos organismos internacionales.
El Gobierno considera que “Argentina forma parte de numerosas organizaciones que demandan gastos por millones de dólares sin ningún beneficio para el país”. Incluso alegan que en estos organismos internacionales “se despliegan propuestas izquierdistas” que van en contra de la política exterior que lleva adelante la actual administración, según contó la periodista Liliana Franco.
La primera medida que tomó Trump fue retirarse de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y Milei anunció su intención de seguir los pasos de Estados Unidos. En reiteradas oportunidades expresó su visión crítica sobre la OMS. Además, el Gobierno analiza romper con el Acuerdo de París, que tiene el propósito de mitigar el cambio climático mediante compromisos internacionales para reducir emisiones de gases de efecto invernadero. Para Milei, el cambio climático es “una mentira socialista”.
Qué dijo Trump sobre la salida de organismos internacionales
Esta posibilidad expone la sintonía de Milei con Trump, que ayer firmó una orden ejecutiva para poner fin a la participación de su país en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas y continuar con la suspensión de fondos para la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
“Siempre he sentido que la ONU tiene un enorme potencial, pero no está cumpliendo con él en este momento. Durante mucho tiempo ha sido ineficaz. Hay grandes esperanzas en ella, pero, para ser honesto, no está bien gestionada”, declaró Trump en la Casa Blanca.
Tras sus declaraciones, el magnate firmó las órdenes ejecutivas afirmando que tanto la UNRWA como el Consejo de Derechos Humanos de la ONU deben "poner orden en sus asuntos". Más tarde, se reunió en el Despacho Oval de la Casa Blanca con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien se ha mostrado muy crítico con la UNRWA y ha acusado al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas de ser parcial contra Israel.