Luego de una serie de negociaciones que tuvieron lugar este miércoles, la Cámara de Dïptuados finalmente aprobó el proyecto de Ficha Limpia anoche. La propuesta apunta a que quienes estén condenados en segunda instancia judicial por delitos de corrupción no puedan presentarse como candidatos en las elecciones ni ser funcionarios.
Tras un largo debate, Ficha Limpia obtuvo media sanción en Diputados, con 144 votos a favor y 98 negativos, estos últimos de la izquierda y Unión por la Patria. El bloque peronista argumentó, principalmente, que el proyecto estaba dirigido a proscribir a Cristina Kirchner, siendo que se apuró su tratamiento en pleno año electoral.
En contraste, La Libertad Avanza, el PRO, la UCR y otros grupos de legisladores allegados al oficialismo argumentaron que se trata de una iniciativa antigua, que asomó en 2016. Por otro lado, hubo dos abstenciones: Miguel Pichetto y Nicolás Massot.

Los cambios en el dictamen de Ficha Limpia
El proyecto de Ficha Limpia avanzó hacia su tratamiento en la Cámara luego de largas discusiones en torno del dictamen, que se destrabaron durante una reunión entre Martín Menem y la llamada oposición dialoguista. En ese contexto, se acordó modificar la "cláusula antiproscriptiva", que prescribía que, para que los candidatos no pudieran presentarse, tenían que tener sentencia firme dictada el año anterior al electoral.
En cambio, se acordó modificar ese período a los 180 días previos a las elecciones. De este modo, para no poder presentarse un dirigente tendría que tener sentencia dictada antes del 29 de abril en el caso del actual calendario electoral.

Ahora, el proyecto pasará al Senado, donde el kirchnerismo intentará ponerle un freno y el oficialismo y los bloques dialoguistas empujarán para que prospere.