Donald Trump continúa lanzando mensajes sugerentes sobre posibles anexiones de diferentes territorios cercanos a Estados Unidos y, recientemente, sumó una nueva declaración que involucra a Canadá. El presidente estadounidense se refirió a su par canadiense como “gobernador”, en línea con sus llamados a convertir al país vecino en su “Estado número 51”.
Durante una conferencia de prensa, en la cual anunciaba nuevas tarifas para los países que graven productos estadounidenses, Donald Trump llamó “gobernador” a Justin Trudeau. “Hablé con el gobernador Trudeau en muchas ocasiones”, dijo el republicano.
Ya durante el espectáculo previo al Super Bowl, contestó “sí, así es” cuando un reportero le preguntó si su idea de anexar Canadá era “real”. “Creo que Canadá estaría mucho mejor siendo el estado número 51, porque perdemos 200.000 millones de dólares al año con Canadá. Y no voy a permitir que eso suceda”, amplió el mandatario.
A principios de febrero, cuando impuso aranceles a las importaciones canadienses, Trump sostuvo que “Canadá debería convertirse en nuestro querido estado número 51″ porque, así, sus ciudadanos pagarían menos impuestos, tendrían mejor protección militar y no deberían pagar aranceles.
Recientemente, Trudeau anunció que renunciaba, y que abandonaría su cargo apenas el Partido Liberal eligiera un nuevo primer ministro. La situación fue interpretada por Trump como un incentivo a sus proyectos expansionistas, a lo cual escribió en su red social Truth: “Estados Unidos ya no puede sufrir los masivos déficits comerciales y subsidios que Canadá necesita para mantenerse a flote. Justin Trudeau sabía esto y renunció”.

Y agregó: “Si Canadá se fusiona con Estados Unidos, no habría aranceles, los impuestos bajarían, y tendrían total seguridad frente a las amenazas de barcos rusos y chinos que constantemente los rodean”.
Entre los planes declarados del presidente estadounidense se cuentan también la toma de Groenlandia y del Canal de Panamá, además de sus recientes insistencias en renombrar al Golfo de México como “Golfo de América”, por la manera generalizada que tienen los estadounidenses de nombrar a su país a título de todo el continente.