El ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, echó y denunció penalmente por sedición a 18 integrantes de la Policía bonaerense que en los últimos días dejaron sus funciones para intentar ejercer un reclamo de mejoras salariales.
Los efectivos, que cumplían funciones en los distritos de Ituzaingó y Tres de Febrero en el oeste del conurbano bonaerense, participaron de una “sublevación” (según definieron las autoridades) y formaron parte de un movimiento organizado por familiares de policías y retirados para reclamar mejoras salariales.
Los policías de la bonaerense implicados tienen sumarios abiertos y causas en la Justicia penal. De acuerdo con los procedimientos internos de la fuerza, la sanción la inició la auditoría de Asuntos Internos, pero preventivamente fueron relevados de sus funciones y serían exonerados.
El reclamo ocurrió el lunes pasado con el formato de "sirenazo", en la estación de servicio Shell ubicada en colectora de Acceso Oeste y Del Prado en Ituzaingó. Otro episodio similar, con la participación de siete patrulleros, ocurrió en El Palomar, partido de Tres de Febrero. El principal problema es que algunos de los involucrados se presentaron con los uniformes oficiales y en horario de servicio.
Sin embargo, además, hay una prohibición legal: las fuerzas de seguridad no están facultadas para llevar adelante reclamos sindicalizados. En el caso de la Policía bonaerense, las mejoras en los salarios están atadas a la paritaria que alcanza a los trabajadores estatales. En este sentido, la semana pasada la administración de Axel Kicillof anunciaba el acuerdo con los gremios de la administración y docentes para los meses de febrero y marzo. Una suba del 9% -7% para febrero y 2% para marzo-.

Desde los perfiles de Facebook que comenzaron a incentivar los reclamoos circula un petitorio con 13 puntos que plantea que no haya sanciones para quiénes concurran a las convocatorias; un aumento del 100% del salario básico; mejoras en la prestación de IOMA y acuerdo con clínicas privadas o que el personal trabaje en un radio de 50 km de su domicilio, entre otros ítems.
“Los echamos de la fuerza y denunciamos penalmente por incumplimiento de sus funciones. Están en graves problemas y va a suceder en cada uno que haga o convoque una sublevación. La policía es policía por decisión y saben que no pueden accionar de esta forma. Además, van en contra de la Constitución”, resaltaron voceros del ministerio de Seguridad, a cargo de Javier Alonso.