Afuera Novak Djokovic: ¿Quién lo hubiese imaginado? El Masters 1000 de Montecarlo nos regaló un bombazo de aquellos. Alejandro Tabilo, el chileno que venía perfil bajo, dio el golpe más fuerte del torneo hasta ahora y despachó en sets corridos ni más ni menos que a Novak Djokovic. Sí, al mismo Djokovic de los 24 Grand Slams. Lo venció 6-3 y 6-4 en una tarde soñada, que quedará marcada a fuego en la historia del tenis sudamericano.
Con un tenis sólido, sin fisuras, Tabilo aprovechó cada grieta que mostró el número 1 del mundo, que venía con ganas de recuperar terreno en polvo de ladrillo tras un arranque de temporada irregular. Pero nada de eso pasó. El que brilló fue el chileno, que jugó como los dioses y no se achicó ni un segundo ante la leyenda serbia.
¿Y a Djokovic, qué le pasa?
La pregunta es inevitable. Porque si bien venía de alcanzar la final en Miami, sus últimas presentaciones mostraban signos de alerta: caídas tempraneras en Doha e Indian Wells, muchos errores no forzados, y una sensación general de que el motor no termina de arrancar.

En Montecarlo, esa tendencia se acentuó. En el primer set, por ejemplo, apenas conectó 4 winners y cometió 14 errores no forzados. Un Novak Djokovic errático, sin profundidad ni claridad, totalmente vulnerable ante un rival que supo leerle la mente. En el segundo set, Tabilo volvió a golpear en el momento justo: quiebre clave para ponerse 5-3 y cerrar el partido con autoridad, pese a la presión de estar frente a una leyenda viva del deporte.
Incluso cuando el serbio amagó con una de esas magias suyas —una dejada exquisita para levantar un match point—, el chileno no se desmoronó. Todo lo contrario: se plantó, sacó pecho y, tras una doble falta que le hizo temblar el pulso por un segundo, volvió a enfocarse y liquidó el trámite.

Un triunfo para la historia
Tabilo ya lo había sorprendido a Novak Djokovic el año pasado en Roma, pero lo de hoy fue otra cosa. Fue un triunfo completo, contundente, sin fisuras. Lo controló de principio a fin, lo sacó de su eje y lo dejó afuera del torneo antes de lo esperado. Un resultado que sacude el cuadro de Montecarlo y abre el juego para otros protagonistas.

Alcaraz, con el camino despejado
La salida de Novak Djokovic, sumada a la de Zverev, deja a Carlos Alcaraz como el único top 5 en carrera. El murciano se ilusiona con el título y, con el camino más liberado, sabe que tiene una gran oportunidad para coronarse en el principado.
Pero hoy, todos los focos están puestos en Alejandro Tabilo. Porque lo que hizo no fue solo una victoria. Fue una gesta. De esas que se recuerdan durante años.