Seis personas murieron ayer tras estrellarse un helicóptero en el río Hudson, en Nueva York. En la aeronave viajaba un empresario español que se encontraba a bordo junto a su esposa y sus tres hijos. Lamentablemente todos murieron, incluyendo al piloto.
El incidente ocurrió alrededor de las tres de la tarde local, en las cercanías del muelle 25, entre Manhattan y la costa de Nueva Jersey. El empresario fallecido es Agustín Escobar, quien ejercía como CEO global de Rail Infrastructure en Siemens Mobility, con sede en Berlín. Anteriormente, ocupó la presidencia y dirección general de Siemens España.
Además del empresario murieron su esposa, Mercé Camprubí Montal, y sus tres hijos de 4, 5 y 11 años. El piloto, cuya identidad aún no trascendió, tampoco sobrevivió. Según informó The New York Times, la familia había llegado recientemente de Barcelona, y alquiló el helicóptero para un vuelo turístico de la compañía New York Helicopter Tours.
Michael Roth, director ejecutivo de la empresa, se mostró muy sorprendido con la situación: "No he visto nada igual en mis 30 años en el negocio de los helicópteros. Lo único que sé al ver el video del accidente es que las palas del rotor principal no estaban en el helicóptero". Luego aseguró estar muy conmocionado: "Es devastador. Soy padre y abuelo, tengo hijos y estoy absolutamente devastado".

"Puede haber sido un impacto de pájaro, o que las palas del rotor principal fallaron. Esto es horrible, pero hay que recordar algo: son máquinas y se rompen", manifestó. Y también confirmó que el piloto llamó minutos antes del impacto "para avisar que estaba aterrizando y necesitaba combustible".
El posible motivo de un fallo técnico catastrófico está siendo investigado por el comisionado de la policía de Nueva York, que hasta el momento solo confirmó que "el avión perdió el control y cayó al agua a pocos pies de la costa de un muelle".
Qué pasó con el helicóptero: ¿era evitable la tragedia?
Según la agencia AP, es muy probable que el piloto no haya tenido ningún margen de maniobra para salvar a la tripulación. Justin Green, abogado de aviación que fue piloto de helicóptero en el Cuerpo de Marines, dijo que en el video se evidencia una clara falla mecánica: "Los rotores principales del helicóptero golpearan el brazo de cola, rompiéndolo y provocando la caída libre de la cabina".
"No hay indicios de que tuvieran control sobre la aeronave. Ningún piloto podría haber evitado el accidente una vez que perdieron los impulsores. Es como una piedra cayendo al suelo. Es desgarrador”, remarcó el especialista.
Otro piloto, Nick Gregory, también fue consultado sobre el caso y afirmó que "el video parece indicar que una vez que las palas se desprendieron, se llevaron la cola y el rotor de cola, dejaron al piloto sin control sobre la aeronave". "Desafortunadamente, el choque fue demasiado intenso y por eso no hubo sobrevivientes", lamentó.
Tal como teorizó Green, se cree que el helicóptero perdió repentinamente una de sus aspas, lo que provocó que el rotor principal se desprendiera del fuselaje y causara una caída en picada hacia las aguas del río neoyorquino. Sin embargo, todavía no hay conclusiones oficiales y deberá confirmarse si eso fue lo que efectivamente ocurrió cuando publiquen los resultados del peritaje.