La Ley de Nietos volvió a estar en boca de muchos argentinos en los últimos años, sobre todo desde que España amplió las posibilidades para tramitar la ciudadanía. Pero entre tanto término, como “Memoria Democrática” o “ciudadanía por origen”, es normal que surjan confusiones. ¿Son lo mismo? ¿Cambió la ley original? ¿A quiénes beneficia realmente? Si tenés ascendencia española y estás evaluando pedir la ciudadanía, esta nota es para vos.
En Buenos Aires, donde muchísimas familias conservan raíces españolas, la Ley de Nietos se presenta como una gran oportunidad para recuperar un vínculo con Europa que viene de generaciones. Pero hay más de una vía para tramitar la ciudadanía y entender cuál te corresponde es clave para no perder tiempo ni presentar papeles que no van a ser válidos. La Ley de Nietos tradicional no es exactamente lo mismo que la ciudadanía por la Ley de Memoria Democrática, aunque están relacionadas.
Aprovechar esta posibilidad puede abrirte las puertas a vivir, estudiar o trabajar en Europa sin restricciones, pero antes hay que tener claros los requisitos. Si tu abuelo o abuela nació en España, si tus padres no hicieron el trámite y querés saber si podés “heredar” esa ciudadanía, seguí leyendo. Te explicamos las diferencias entre ambas normativas, cómo saber cuál aplica a tu caso y qué pasos seguir para obtener el pasaporte español.

¿Qué es la Ley de Nietos y qué permite?
La conocida Ley de Nietos fue una disposición especial que facilitó la obtención de la ciudadanía española a descendientes de españoles, principalmente nietos, que no habían podido acceder por la legislación vigente hasta ese momento. Esta norma fue parte de la Ley de la Memoria Histórica (2007) y permitió por un período limitado que muchos nietos de españoles pudieran acceder al pasaporte europeo.
El objetivo principal era reparar situaciones de desarraigo ocasionadas por el exilio o la emigración forzada por motivos políticos, ideológicos o económicos. Aunque su vigencia original finalizó, en octubre de 2022 se promulgó la Ley de Memoria Democrática, que reabre y amplía las posibilidades para obtener la ciudadanía, en muchos casos bajo condiciones similares a las que planteaba la Ley de Nietos.
¿Y la Ley de Memoria Democrática? ¿Es lo mismo?
No exactamente. Si bien ambas leyes comparten espíritu reparatorio, la Ley de Memoria Democrática es una nueva normativa que actualiza y reemplaza a la anterior, extendiendo el derecho a la ciudadanía a más casos. Incluye a nietos e incluso a hijos mayores de edad de quienes ya obtuvieron la ciudadanía, algo que la Ley de Nietos no contemplaba.
Además, permite que puedan acceder aquellos cuyos ascendientes españoles se exiliaron por causas políticas, ideológicas o de elección sexual, entre otros motivos. Es más inclusiva y específica, pero no se aplica de forma automática: cada caso debe analizarse según los criterios establecidos.

¿Cómo saber cuál me corresponde?
Depende de tu vínculo con el familiar español y de si éste conservaba la ciudadanía al momento del nacimiento de su descendencia. Si sos nieto/a de un español o española nacido en España, y tu madre o padre no adquirió la nacionalidad, es probable que apliques bajo la Ley de Memoria Democrática.
Un dato clave: si ya hubo algún trámite previo (por ejemplo, si tu madre accedió a la ciudadanía por la vieja Ley de Nietos), puede que vos también entres por extensión como hijo de persona nacionalizada. Lo mejor es consultar con el consulado o con un gestor especializado, porque cada caso puede tener particularidades.
¿Cómo se obtiene la ciudadanía española?
El trámite se inicia en el consulado español correspondiente a tu domicilio. Vas a necesitar acreditar tu vínculo con el familiar español (actas de nacimiento, matrimonio, etc.), además de otros documentos personales y eventualmente pruebas del exilio si corresponde. En muchos casos, también se solicita que los documentos estén apostillados y traducidos.
Una vez presentada la documentación, el consulado evalúa si tu caso encuadra en la normativa vigente (ya sea la Ley de Nietos original o la nueva Ley de Memoria Democrática). El proceso puede demorar varios meses, pero una vez aprobado, obtenés la ciudadanía de forma definitiva.

Un derecho que puede cambiar tu presente y tu futuro
En definitiva, si tenés sangre española y venís escuchando hablar de la Ley de Nietos, no lo dejes pasar. Ya sea por la normativa original o por la Ley de Memoria Democrática, es posible que estés habilitado para obtener la ciudadanía española y con ella, una serie de beneficios tanto en España como en toda la Unión Europea.
Este es el momento ideal para chequear los papeles familiares, asesorarte bien y dar el primer paso. Porque recuperar esa identidad que viene de tus abuelos también es una forma de proyectar tu futuro con nuevas oportunidades.