Desde bien temprano, una multitud se fue acercando al Vaticano para darle el último adiós al papa Francisco, fallecido el lunes a los 88 años. Las exequias públicas comenzaron este miércoles con una ceremonia cargada de emoción y recogimiento, que marcará tres días de homenajes al pontífice argentino.
El cuerpo de Jorge Bergoglio fue trasladado desde la residencia de Casa Santa Marta hasta la Basílica de San Pedro, en una procesión solemne encabezada por el cardenal Kevin Farrell, camarlengo de la Iglesia Católica. El recorrido incluyó la Plaza de Santa Marta y la de los Protomártires Romanos, hasta llegar al corazón del Vaticano.
Una vez dentro de la basílica, el féretro fue depositado en el Altar de la Confesión, justo bajo el imponente baldaquino de Bernini, en uno de los puntos más sagrados del templo. Allí, el silencio y la emoción se mezclaron con el murmullo de los fieles, que de a poco fueron ingresando para despedirse del Papa que marcó una época.

Un adiós multitudinario al papa Francisco
Mientras el Vaticano abría sus puertas al público, más de 20 mil personas ya se habían acercado a la Plaza de San Pedro. Entre aplausos y lágrimas, muchos saludaban con el clásico "¡Gracias, Francisco!", despidiéndose del primer Papa latinoamericano de la historia.
La ceremonia empezó con una Liturgia de la Palabra que dio inicio oficial a los homenajes públicos. La basílica estará abierta hasta las 12 de la noche durante miércoles y jueves, para que todo aquel que lo desee pueda acercarse al féretro y rendirle tributo al papa Francisco.

Roma, blindada para el funeral
El funeral del papa Francisco está previsto para el sábado y se espera una verdadera marea humana en la capital italiana. Las autoridades ya desplegaron un operativo de seguridad enorme: más de 4.000 policías en las calles, cierre del espacio aéreo y controles reforzados en los accesos a Roma.
Según estimaciones oficiales, más de 200 mil personas podrían asistir a la despedida final. También está prevista la llegada de líderes políticos y religiosos de todo el mundo, que vendrán a despedir a uno de los papas más influyentes del último siglo.
