Si estás buscando una escapada distinta para el próximo fin de semana largo, Coronel Pringles se presenta como una joyita escondida en la provincia de Buenos Aires. Rodeado de sierras, paisajes rurales y caseríos pintorescos, este destino invita a cortar con la rutina y entregarse a unos días de descanso, naturaleza y buena comida.
Ubicado en el sudoeste bonaerense, este partido combina a la perfección la tranquilidad de los pueblos rurales con la historia, la cultura y una oferta turística que sorprende por su diversidad. Ideal para una escapada en pareja, en familia o con amigos, es un lugar donde el tiempo parece ir más lento, y cada rincón guarda una postal inolvidable.
Ya sea disfrutando de una casa de campo, recorriendo museos rurales o haciendo trekking por las sierras, Coronel Pringles tiene todo lo necesario para que esta escapada se convierta en una experiencia para volver a repetir. A continuación, te contamos qué hacer, dónde ir y cómo aprovechar al máximo este destino bonaerense que invita a relajarse y reconectar con lo simple.
Casas de campo: relax y tradición
Coronel Pringles es sinónimo de turismo rural, y en este rubro se destacan las casas de campo con propuestas de lo más completas. Una de ellas es La Mercedes, a unos 70 km de la ciudad cabecera. Rodeada de paisajes únicos y con el Río Sauce Grande como telón de fondo, ofrece cabalgatas, trekking y comidas criollas como cordero al asador. Tiene quincho, pileta y capacidad para 10 personas.
Otra opción ideal para una escapada relajada es El Rincón, con un parque arbolado y colorido, pileta-tanque y hasta una plazoleta para mascotas. Perfecto para quienes buscan un entorno natural pero con todas las comodidades.
Pueblos rurales con historia y sabor
En los alrededores de Pringles hay parajes que parecen detenidos en el tiempo. Uno de ellos es La Paloma, donde el viejo almacén y la escuela reconvertida en museo ofrecen una experiencia entrañable. Las comidas típicas, como el chorizo casero, el disco de arado y el flan con dulce, son parte del atractivo.
Otro imperdible es Indio Rico, un Pueblo Turístico donde se mezclan cultura, comunidad y naturaleza. Hay una estación ferroviaria histórica, una iglesia con acceso a su torre, y un almacén de ramos generales que parece salido de otra época. Además, se puede visitar la casita de las artesanas, donde se exhiben productos hechos a mano por mujeres del pueblo.
Estancias rurales: descanso con todas las letras
Las estancias turísticas son el alma de esta escapada. La Estancia La Porfía propone jornadas de campo con almuerzos típicos, paseos, historias indígenas y relax absoluto. Si preferís algo con más comodidades, la Estancia La Luisina ofrece pileta climatizada, jacuzzi, sauna, juegos de mesa, gastronomía gourmet y un entorno ideal para desconectarse del ritmo urbano.
Cabalgatas, caminatas, paseos en bici, avistaje de aves, deportes al aire libre y juegos tradicionales completan una oferta que hace de esta escapada una experiencia inolvidable.
Patrimonio y arquitectura: un viaje al pasado
En el centro de la ciudad, la arquitectura de Francisco Salamone marca presencia con joyas del estilo Art Decó, como el Palacio Municipal, la Plaza Juan Pascual Pringles y el antiguo matadero. También destacan la Parroquia Santa Rosa de Lima, la Casa de la Cultura y el histórico Teatro Español, todos puntos ideales para una visita cultural durante tu escapada.
Balneario Municipal: naturaleza y actividades para toda la familia
A orillas del arroyo Pillahuincó se extiende el Balneario Municipal, un predio de ocho hectáreas con lago artificial, piletas, canchas de todos los deportes, confitería y zona de camping. Además de ser ideal para refrescarse, el espacio se usa todo el año para eventos deportivos, shows y actividades recreativas. Si vas con chicos o con ganas de moverte, es un planazo para sumar a tu escapada.
¿Cómo llegar desde la Ciudad de Buenos Aires?
Para llegar a Coronel Pringles desde CABA, hay que tomar la Ruta Nacional Nº 3 hacia el sur hasta Azul, luego empalmar con la Ruta Provincial Nº 51 hasta Coronel Pringles. Son unos 550 kilómetros que se pueden hacer en auto en aproximadamente 6 horas y media. También hay servicios de micros desde Retiro y Constitución, aunque se recomienda averiguar con anticipación por disponibilidad durante el finde largo.
Coronel Pringles se presenta como un destino ideal para una escapada donde el campo, la historia y la tranquilidad son protagonistas. Una oportunidad para volver a lo simple, comer rico, respirar aire puro y disfrutar sin apuro. ¿Te lo vas a perder?
