El caso de Madeleine McCann sumó un último revés: se reveló la existencia de un disco duro con material comprometedor que dirige todas las hipótesis hacia que la niña fue asesinada poco después de su desaparición.
El disco duro con datos que comprometen al principal sospechoso de la desaparición de la niña británica Madeleine McCann, Christian Brueckner, apareció en una de sus fábricas abandonadas en el pueblo de Neuwegersleben, Alemania, en 2016 pero el dato sobre los contenidos de estos archivos recién circulan ahora.
Christian Brueckner es un alemán que actualmente cumple condena por una violación en 2007 en Algarve, Portugal, la misma zona donde desapareció Madeleine McCann. Vivió en Algarve entre el 1995 y 2007. Madeleine desapareció el 3 de mayo de 2007 en las playas de este distrito portugués y desde el momento las autoridades británicas no cesaron la búsqueda.

El disco duro con archivos que confirman la hipótesis del asesinato de Madeleine McCann
En la fábrica abandonada se hallaron 8.000 archivos vinculados a abusos sexuales de menores y material pedófilo almanecados en USB y memorias externas. Entre lo hallado había un disco duro que contiene imágenes explícitas de abuso sexual a menores y pedofilia.
Además, en la propiedad abandonada la Policía halló 75 trajes de baño infantiles, máscaras, juguetes, bicicletas para niños, muñecos y tres armas de fuego no registradas y municiones.
Gracias al hallazgo de las imágenes, los fiscales del caso sostienen que esto refuerza la hipótesis de que la niña fue asesinada poco tiempo después de su desaparición. Otra prueba es la ubicación por satélite que se rastreó de Brueckner, donde se lo pudo hallar frecuentando las zonas aledañas al lugar donde desapareció la niña.

Un testimonio del propio Brueckner durante un evento en Órgiva, España, en 2008 es significativo: según el informante Helge Busching, el sospechoso le dijo: "Sí, no gritó", frase que fue interpretada como una posible alusión a Madeleine. Además, existe un testimonio de su compañero de celda -de apellido Codin- que data del 2020, quien contó que el sospechoso le confesó que había secuestrado a "una niña" durante un robo en Portugal y le pidió a su compañero que quemara su guarida cuando saliera de prisión.