La Embajada de China en Argentina emitió un contundente comunicado en rechazo a las declaraciones del enviado especial de Estados Unidos para América Latina, Mauricio Claver-Carone, quien criticó la vigencia del swap de monedas entre Argentina y China. La representación diplomática calificó los dichos del funcionario norteamericano como “intervencionistas” y ajenos a la soberanía de ambos países.
“El swap es una cooperación mutuamente beneficiosa decidida de manera autónoma por dos naciones soberanas, por lo tanto, Estados Unidos no tiene derecho a cuestionarlo ni señalarlo con el dedo”, expresó la embajada en un mensaje que sube el tono diplomático entre las potencias, en medio de la presión estadounidense para que Argentina cancele esa línea de crédito.
En el mismo texto, China acusó a Claver-Carone de emitir juicios “repletos de lugares comunes, prejuicios y manipulaciones propias de la Doctrina Monroe”, y apuntó contra el intento de Estados Unidos de imponer su voluntad sobre terceros países. “Exigir que otros actúen según sus ‘órdenes’ no refleja la libertad que dicen defender, sino una mayor falta de ella”, agregaron.
El comunicado concluyó con una fuerte crítica directa: “Exhortamos a las autoridades estadounidenses a que contribuyan al desarrollo de otros países en lugar de crear obstáculos a las cooperaciones bilaterales de otras naciones. ¡Adiós, Carone!”, señalaron con ironía y firmeza desde la embajada.

La respuesta china llega después de que Claver-Carone declarara que “mientras tenga el país el swap, está amarrado a China y depende de ese swap para poder mantenerse económicamente. Entonces, Argentina no es libre”. Semanas antes, el mismo funcionario había planteado en Washington que el objetivo era que Argentina “termine con esa línea de crédito”.
En este escenario, el Gobierno argentino aseguró que no cancelará el acuerdo con China y que tampoco lo hará por presiones externas. “No lo vamos a cancelar y tampoco lo vamos a hacer porque lo pidan ellos”, indicaron desde Casa Rosada. La línea fue renovada hasta julio de 2026 y es considerada clave para la estabilidad financiera de corto plazo.