En los últimos días se habló mucho sobre la posible vuelta de Lionel Messi a Newell's Old Boys, el club de sus amores. Sin embargo, pese a las grandes chances de que esto se concrete, más aún teniendo en cuenta el regreso de Di María a Rosario Central, existe un fuerte conflicto entre la familia del astro argentino y el presidente de la Lepra.
Ignacio Astore, quien actualmente es el presidente de Newell's, reafirmó que, en medio de la incertidumbre sobre su futuro en el Inter Miami, todos sueñan con la posibilidad de que Messi juegue en el fútbol argentino. "Es una cosa que tiene que decidir él. No hablé con el jugador. Considero que no corresponde hablar con él porque sería ponerlo en un lugar incómodo, tal vez tenga contrato, tal vez considera que no sea el momento, quizás tiene otros compromisos familiares. Sé el aprecio que tiene por la institución y las ganas que tiene de venir", señaló.
"El Chiqui Tapia está trabajando permanentemente con respecto a esto. A Messi le falta una Copa Argentina, una Copa Sudamericana y Libertadores, porque de las otras, tiene de todos los colores. Es decisión de él", añadió Astore.

El hecho de que el presidente de Newell's hiciera particular énfasis en que el Chiqui Tapia estaba trabajando en la vuelta de Messi se debe a un conflicto entre la familia de la Pulga y el propio Astore. Fuentes rosarinas confirmaron que el encargado de la máxima entidad del fútbol argentino actuaría como "mediador" entre ambas partes.
En ese sentido, lo que muchos desconocen es que Astore, hoy presidente de Newell's, era jefe de médicos del club rosarino cuando le negaron el tratamiento a Messi. Si bien trascendió que no manejaba presupuestos, confirmaron que fue uno de los que le bajó el pulgar a Leo en su momento. "Celia, la mamá del actual futbolista del Inter Miami, no olvida y es muy memoriosa", revelaron fuentes del club Rojinegro.
Astore y el Día del Abandono
Ignacio Astore fue el jefe médico de Newell's en la década del 90 y principio de los 2000. Lógicamente, fue partícipe del famoso "Día del Abandono", una fecha muy recordada por los hinchas de Rosario Central.
El 23 de noviembre de 1997 se disputó el clásico rosarino entre Newell's y el Canalla. Con el partido 4 a 0 a favor de Rosario Central, y la Lepra con cuatro expulsados, los médicos del Rojinegro le dijeron al árbitro que tenían un jugador lesionado y que, por ende, el encuentro no podía seguir.

Astore también fue médico de Maradona durante su paso por Newell's. Una de las anécdotas que los vincula data del primer partido de Diego en el Parque Independencia, en el amistoso contra Emelec de Ecuador.
"Diego tuvo una contractura en el gemelo y cuando lo estoy revisando, cuando vos tocás la masa muscular de un jugador profesional no te das cuenta si está contracturado o no, tenés que entender y comprender lo que el jugador me dice. El miedo que tenía era paralizante porque no era una pierna cualquiera. Y me dice, 'quédese tranquilo doctor, que si me pasa algo, el responsable soy yo. Yo quiero jugar 45 minutos con esta contractura'. Jugó el primer tiempo y 20 del segundo e hizo un golazo y de derecha", recordó Astore.