Israel interceptó este lunes una embarcación de la organización Flotilla de la Libertad que transportaba ayuda humanitaria hacia la Franja de Gaza. Entre los pasajeros se encontraba la activista climática sueca Greta Thunberg, junto a ciudadanos de Brasil, Francia, Alemania, Países Bajos, España, Suecia y Turquía.
La interrupción del viaje del barco Madleen ocurrió cerca de la costa egipcia, alrededor de las 5:30 hora local. Según un mensaje difundido por los activistas, en ese momento se perdió la comunicación con la nave. Una imagen difundida muestra a los ocupantes con chalecos salvavidas y las manos en alto dentro del barco.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel confirmó que los ocupantes están ilesos y que el buque está siendo escoltado hacia el puerto de Ashdod. El Ministerio de Defensa agregó que los pasajeros serán repatriados a sus países de origen, aunque aún no se informó la ubicación exacta del barco.
En un video pregrabado difundido tras la detención, Greta Thunberg denunció haber sido “secuestrada” por las fuerzas israelíes y pidió a sus seguidores ejercer presión sobre sus gobiernos para lograr su liberación y la de sus compañeros.
Desde la Cancillería israelí calificaron la iniciativa como una “provocación mediática” impulsada por “celebridades en un yate de selfis”. En sus redes oficiales, el gobierno compartió imágenes de los activistas recibiendo alimentos y agua, y sostuvo que la ayuda transportada equivalía a “menos de un camión”.
“Hay formas legítimas de enviar ayuda a Gaza. Esto no fue una misión humanitaria, sino una estrategia para ganar notoriedad”, afirmó un vocero del gobierno israelí, en medio de crecientes tensiones por el bloqueo a la Franja y las condiciones humanitarias en el enclave palestino.