La fuerte ola polar que atraviesa gran parte del país ya empieza a sentirse en la vida cotidiana. Por decisión del Comité de Emergencia Energética, se interrumpió por completo la venta de GNC en estaciones de servicio de distintas provincias, al menos por 24 horas. La medida busca garantizar el suministro de gas para los hogares y servicios esenciales en medio de una demanda récord por las bajas temperaturas.
La suspensión afecta a aquellas estaciones que tienen contrato de suministro interrumpible, una modalidad habitual en muchas regiones del país. La orden rige desde las 14 del miércoles 2 de julio hasta las 14 del jueves 3, aunque en varias localidades los efectos comenzaron a notarse antes. También hay industrias que se vieron alcanzadas por la restricción.
Aunque en un principio la medida estaba enfocada solo en las estaciones con contratos interrumpibles, en las últimas horas también se reportaron cortes en puntos con contratos no interrumpibles, lo que generó preocupación en algunas provincias del centro y norte del país como Córdoba, Santa Fe, Mendoza y sectores de la provincia de Buenos Aires.
En la Ciudad de Buenos Aires, por el momento, el suministro de GNC continúa con normalidad debido a la densidad poblacional y la prioridad energética que representa. En el sur del país, en cambio, solo mantienen el servicio aquellas estaciones que tienen contratos firmes de provisión.
“Ninguna estación puede vender GNC”: tensión en las provincias
En Mendoza, la situación fue tajante. "Está prohibido que toda estación expenda GNC, ya sea que tenga suministro firme o interrumpible. Ninguna estación puede vender GNC por razones de fuerza mayor", explicó Isabelino Rodríguez, presidente de la Asociación Mendocina de Expendedores de Nafta y Afines (AMENA). Su mensaje fue replicado por otras cámaras provinciales, que advirtieron que se trata de una situación crítica.
¿Qué diferencia hay entre contratos interrumpibles y no interrumpibles?
En el sistema energético argentino, la mayoría de las estaciones de GNC funcionan bajo contratos interrumpibles. Esto significa que pueden ser desconectadas temporalmente si hay una emergencia o si se necesita priorizar el gas para los hogares, hospitales o escuelas. Es una cláusula habitual, pensada justamente para este tipo de situaciones extremas.
En cambio, los contratos no interrumpibles (más costosos) garantizan un suministro continuo, incluso en momentos críticos. Por eso, suelen encontrarse en las provincias del sur, como Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, donde el gas natural es clave para calefacción y transporte, y no hay alternativas energéticas viables.
Por el momento, la suspensión de la venta de GNC es temporal, pero desde el sector no descartan que si la ola de frío se mantiene puedan repetirse medidas similares en los próximos días.
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