El barrio porteño de Belgrano fue escenario esta madrugada de un confuso crimen: un hombre de 33 años fue encontrado muerto a puñaladas sobre la avenida Cabildo y junto a él, estaba su mujer y un cuchillo de cocina. Según dijo la pareja, la víctima se hirió a sí misma en su domicilio y luego salió a la calle, pero fue detenida.
El cadáver fue hallado en la esquina de Cabildo con la calle Roosevelt, en pleno Belgrano. Allí se hizo presente personal de la Comisaría 13-A, donde encontraron el cuerpo junto a la mujer de 40 años. Según sus declaraciones, ambos se encontraban en su departamento, a pocas cuadras, y que tras una discusión el hombre se ocasionó a sí mismo las lesiones con el cuchillo en la zona del tórax y luego descendió hacia la calle, donde cayó inconsciente.
El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Nº14, a cargo del juez Edmundo Rabbione y la Secretaría 143, dispuso la detención de la mujer y encomendó las tareas periciales a la Unidad Criminalística Móvil. Las investigaciones continúan para determinar las circunstancias del hecho y establecer cómo ocurrió el episodio.
De acuerdo con lo que trascendió, en base a los testimonios de vecinos, la sospechosa tendría antecedentes por conflictos en el edificio donde vive y en el barrio de Belgrano. Según dijo un vecino de la cuadra donde vivía la mujer, la relación entre ambos era muy conflictiva y que parecían mostrar problemas de adicciones y de salud mental.

“Acá vivía una chica, a quien la madre le habia dejado la casa. Tenía problemas de adicción y tenía un novio que venía a gritarle ‘abrime, abrime’. Se cagaban a palos. Era una relación amor-odio. Todo muy tóxico. Era insoportable. Hace un mes y medio se agarraron a palos. El pibe iba y venía”, afirmó a los medios televisivos.
Otra vecina afirmó que es una situación "que se veía venir". "La vi revolviendo basura, la quise ayudar. Otros vecinos hicieron denuncias. La Policía los conocía y sabían de ellos. Esta madrugada no escuché nada porque cambiamos una ventana por los ruidos que había. Mi marido escuchó lo de siempre. Él pidiéndole que le abra. ‘Mai, Mai’, le gritaba. Hace unos meses ella gritó ‘me va a tirar’ pero después ella salió a perseguirlo”, agregó la vecina de Belgrano.