El básquet argentino no pasa por su mejor momento. Tras el baldazo que fue quedarse sin Copa del Mundo a principios de año, la selección argentina perdió con Bahamas y ahora se quedó también afuera de los próximos Juegos Olímpicos. Duro presente y preocupación de cara al futuro.
Los dirigidos por Pablo Prigioni perdieron por 82-75 ante el seleccionado caribeño en la final del Preclasificatorio que se disputó en Santiago del Estero y dejó pasar la chance de competir por un boleto a la cita Olímpica de París 2024.
Bahamas consiguió así el pase a los Preolímpicos de julio, donde también estarán Bahrein, Croacia, Camerún y Polonia. La competencia se jugará con cuatro grupos de seis equipos y cada una de las zonas dará un boleto a París 2024.
Por el lado argentino, esta de decepción se suma a la de no haber podido clasificar al Mundial de Filipinas, Indonesia y Japón, que comenzará el próximo 25 de agosto. La última edición en la que Argentina no clasificó a una Copa del Mundo fue en Colombia 1982, hace más de 40 años. Por su parte, la última vez que no había logrado la clasificación a los JJ.OO. había sido en Sydney 2000.
Cabe recordar que Argentina es vigente subcampeona del mundo (China 2019) y vigente campeona de América (Brasil 2022), además de haber conseguido el oro en los Juegos Panamericanos de Lima 2019. Quedarse afuera de los dos torneos más importantes teniendo estas últimas performances es realmente algo inédito.
Ya sin las figuras de la Generación Dorada (solo queda Carlos Delfino, con 40 años) y con un recambio en el que únicamente Facundo Campazzo y Gabriel Deck parecen estar preparados para ponerse el equipo al hombro, la selección argentina de básquet parece haber caído en un pozo del que es necesario que salga de manera rápida para hacer honor a su historia, incluso la reciente.
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