Un hombre de 21 años fue detenido por el asesinato de una jubilada de 72 en Quilmes, luego de que su propio padre lo entregara a la policía. La mujer fue hallada sin vida en su casa por uno de sus familiares, que encontró el lugar completamente revuelto. Tras el violento crimen, el asesino sólo se llevó dos televisores y una bolsa de carne.
El asesinato de la jubilada, identificada como Teresa, ocurrió en Quilmes Oeste, en la calle Oliveri al 3600. Sus familiares la encontraron sin vida y con signos de haber sido golpeada y torturada en lo que parecía haber sido un intento de robo. A las pocas horas, el autor del aberrante crimen fue detenido gracias a sus propios allegados.
Fue la tía del propio asesino la que declaró haberlo visto cruzar la medianera de su casa con los objetos robados a la jubilada a eso de las 16:30 del lunes, y su padre quien lo entregó a la policía. Se trata de Gustavo Molina, de 21 años. Según la información brindada por la prensa local, tenía problemas vinculados con el consumo de drogas y también habría mantenido un “conflicto vecinal” con Teresa.
Además, el responsable por el asesinato de la jubilada había estado preso en el pasado reciente. Su último ingreso a la cárcel fue el 23 de febrero en el marco de una causa por “encubrimiento agravado”, pero recuperó la libertad días más tarde, consignó el portal Hecho en Quilmes.
En la noche de este lunes, tras el testimonio de su tía, la fiscal interviniente Ximena Santoro ordenó su detención y la policía salió a buscarlo por la zona del barrio Villa Itatí, hasta que lo encontró con ayuda de su propio padre y lo trasladó a la Comisaría Quinta de La Cañada. Se lo acusa de “homicidio criminis causa”.
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