Alperovich declara en el juicio por abuso sexual previo a los alegatos

José Alperovich declarará el lunes en el juicio por los abusos sexuales que denunció su sobrina, Florencia León. Cabe destacar que el exgobernador de Tucumán está citado para las 10 de la mañana, en la sala de audiencias del Tribunal Oral en lo Criminal N°29, a cargo del juez Juan María Ramos Padilla.

El fiscal Sandro Abraldes y los representantes de la querella conducirán el interrogatorio. Se espera que el testimonio de Alperovich dure varias horas. Los alegatos finales comenzarán el 10 de junio y después se conocerá el veredicto del juez. En caso de que lo consideren culpable, el exgobernador podría recibir una pena de hasta 15 años de cárcel.

A Alperovich se lo juzga por seis casos de violencia sexual agravada por acceso carnal, y por haber cometido al menos tres hechos de abuso sexual, dos de ellos en grado de tentativa. Todo esto surgió gracias a la investigación judicial que se inició en 2019, cuando la su sobrina decidió realizar la denuncia.

La excolaboradora de la Cámara de Senadores había publicado un comunicado que decía: "Denunciar fue liberarme. Hoy celebro y reconozco en ese difícil proceso el bienestar y la mejoría que cada día experimento. Esto me confirma que callar no es para mí nunca más una opción de vida".

Dicho expediente señala que los ataques sexuales ocurrieron entre 2017 y 2018. La mujer detalló que los presuntos abusos se produjeron en Tucumán y en un departamento de Puerto Madero. Después de una profunda investigación que llevó cinco años, la fiscalía consideró que en todos los casos el exsenador abusó de una relación de dependencia, de poder y de autoridad.

Las pruebas en contra de Alperovich que considera la fiscalía son las pericias psicológicas y las declaraciones de la ginecóloga de la víctima. La médica confirmó los dichos de la denunciante al revelar las lesiones vaginales que descubrió durante una consulta en 2018. Aquella fecha coincidente con el hecho más violento relatado por Florencia León.

Respecto a esto, la acusación fiscal señaló: "Quedó comprobado cómo el imputado, utilizando su fuerza física, ejerciendo abuso intimidatorio de poder y violencia de género, reducía bajo su dominio a la víctima, y la ponía como un mero objeto de satisfacción sexual, de cosificación, sometiéndola de forma violenta, ultrajante y degradante, haciéndolo por el transcurso de un poco más de tres meses".