El ataque de Estados Unidos a Irán abrió una escalada bélica que podría golpear a la economía mundial e incidir fuertemente sobre la economía argentina.
El inminente bloqueo del estrecho de Ormuz- por donde pasa el 20% del comercio de petróleo- abrirá un escenario de incertidumbre que castigaría a los activos argentinos, con una demora en la baja del riesgo país y una reapertura de la dinámica inflacionaria.
Este lunes, luego de dispararse hasta 4% en la apertura de los mercados asiáticos, el barril de crudo WTI moderó el alza diaria al 1,22% y se ubicó en los u$s74,75, luego de haber llegado incluso a los u$s77. Por su parte, el Brent escala un 1,25%, hasta los u$s77,95, después de tocar un máximo intradiario de u$s81, el nivel más alto en los últimos cinco meses.

La economía de guerra según los analistas
Según el economista Gustavo Ber, esta alza se produce en “un contexto de mayor aversión al riesgo global que, de profundizarse, continuaría condicionando a los activos financieros locales, que han venido ganando correlación con el clima externo a partir del proceso de normalización económica”. En este sentido, explicó, “la mejora en las valuaciones de los bonos en dólares –además de las acciones de empresas locales– transitaría una pausa, lo que implica que el riesgo país podría demorar su compresión y, así, postergar el regreso al roll-over [refinanciamiento] de vencimientos, más allá de reanudar la convergencia hacia el promedio regional, en torno a los 400 puntos básicos”.
La mejora en las valuaciones de los bonos en dólares –además de las acciones de empresas locales– transitaría una pausa, lo que implica que el riesgo país podría demorar su compresión
Por su parte, Fernando Camusso, director de Rafaela Capital, coincidió en que lo lógico es que los inversores vendan activos riesgosos y se trasladen hacia lugares más seguros. “Esto impactará en el equity global, y la Argentina no va a ser la excepción. Las acciones seguirán golpeadas y los bonos, laterales o para abajo, si bien el martes puede haber una apertura de consulta de MSCI para reclasificar al país en 2026”, señaló, en referencia al indicador que pondera la inversión en activos financieros globales.

Gustavo Neffa, socio y director de Research for Traders, también opinó que, en el corto plazo, las bolsas, los bonos y la economía en general no van a estar favorecidos. “En primer lugar, tenés un impacto vía el canal financiero. Creo que ahí tenés una prima de riesgo país que se niega a bajar y que, con esto, obviamente va a seguir sostenida. Estaba en los 714 puntos. No va a bajar de ahí en las próximas semanas”, consideró.
Por otro lado, el encarecimiento del crudo también es sinónimo de presiones inflacionarias, tanto en la Argentina como en Estados Unidos. “Esto podría traducirse en un menor margen para recortes de tasas de interés por parte de la Fed e incluso en una mayor presión sobre las tasas largas en Estados Unidos, lo que complica aún más el escenario para el equity global”, afirmaron en Adcap Grupo Financiero.