En su primer acto de campaña de cara a las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, el presidente Javier Milei desembarcó en la ciudad de La Plata con un encendido discurso cargado de insultos y críticas al gobernador bonaerense Axel Kicillof.
Milei calificó al gobernador como un "pichón de Stalin" y “el último zar de la miseria”. El evento, organizado por La Libertad Avanza, se desarrolló en el Salón Vonharv de Gonnet ante cientos de militantes, dirigentes y funcionarios nacionales.
En lo que Milei definió como "la antesala de la gran batalla que se aproxima en territorio bonaerense", el jefe de Estado aseguró que la provincia de Buenos Aires está “injustamente castigada por décadas de desidia” y atraviesa “un pésimo presente por el pichón de Stalin, Axel Kicillof”.
Acompañado por su gabinete, entre los que se encontraban Patricia Bullrich, Luis Caputo y Federico Sturzenegger, el mandatario reivindicó el trabajo de sus ministros al sostener que "el milagro argentino" que empieza a reconocerse en el exterior es producto de "estas grandes personas".
"Gracias a ustedes vamos a sacar a la Argentina del pozo y la vamos a hacer grande nuevamente", afirmó Milei desde el escenario, en tono épico y apelando a sus ya clásicas referencias históricas y filosóficas. Citó incluso a Maquiavelo para advertir que "el momento de la libertad es ahora" y que "la única forma de completar el cambio es transformar no sólo la Nación, sino también las provincias y municipios".
Sin filtro, arremetió contra el mandatario provincial al afirmar que “la política bonaerense es como volver a la miseria del gobierno de Massa" y dijo que la gestión de Kicillof "cagó desde arriba de un poste" a los ciudadanos al cobrarles "impuestos para hacer obras y no les dieron nada”. Además, criticó el manejo financiero de la provincia y lo calificó como "un desastre.
“Pero, ¿qué quieren? Si el soviético suma con dificultad, no puede sumar ni con un ábaco, diría que hasta tiene dificultades para hacer un cero con un vaso. Nunca se le pasó por la cabeza a este pelotudo bajar el gasto público", ironizó Milei, fiel a su estilo frontal. La militancia, lejos de incomodarse, celebró cada una de sus frases más punzantes.
Incluso, ante los cánticos del público, el Presidente se permitió un insulto más directo: “Kicillof es el burro sin su principal atributo, es el burro eunuco”, disparó.
Según Milei, el gobierno bonaerense quiere "convertir a la provincia de Buenos Aires en una isla a la cual las reformas que estamos haciendo nunca lleguen y que la gente siga viviendo bajo su yugo". Y reforzó: “Kicillof es el último zar de la miseria, el heredero de un modelo fracasado que destruyó todo lo que tocó, está escondido en su Kremlin, un monarca diminuto que priva a las personas de su libertad por miedo de que ganen autonomía".
En su análisis, el líder libertario planteó que lo que está en juego en las próximas elecciones no es sólo una disputa partidaria, sino “un choque de modelos y de direcciones”, sintetizado en su fórmula: “Kirchnerismo o libertad”.
"También acá hay que hacer una limpieza. Esa es la tarea que nos encomendó la ciudadanía y que sin dudas van a ratificar los bonaerenses en septiembre y en octubre", remató el Presidente.
El acto, que funcionó como el puntapié oficial de la campaña libertaria en el distrito, fue convocado por la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y coordinado por Sebastián Pareja, referente de La Libertad Avanza en Buenos Aires y principal interlocutor en la negociación con el PRO.
Además de los principales ministros nacionales, también se hicieron presentes el diputado José Luis Espert y Demian Reidel, titular del Consejo Nuclear Argentino. Con todos ellos, Milei busca consolidar su armado político en el mayor distrito electoral del país y dar pelea en un territorio históricamente adverso para su espacio.
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