En Bulgaria, el martes a la madrugada, se calcinaron en un autobús 46 personas, entre ellas 12 menores de edad. El vehículo en el que viajaban se incendió en una autopista y los pasajeros quedaron atrapados adentro, solo siete lograron salir del micro con vida.
El siniestro hecho ocurrió a las 02:00 hora local en una autopista a 40 kilómetros al sur de la capital Sofía. El vehículo volvía a Skopje, la capital de Macedonia del Norte, tras haber realizado un viaje a Turquía. Con respecto a los pasajeros la mayoría eran macedonios.
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El primer ministro de Macedonia del Norte, Zoran Zaev, viajó inmediatamente a Sofía para encontrarse en el hospital con los heridos del siniestro, el más grave de la última década en Europa. Además, declaró tres días de duelo nacional, mientras que este miércoles Bulgaria y Kosovo también realizarán un día de duelo.
También, el ministro búlgaro de Interior Boiko Rashkov se pronunció al respecto y calificó la escena como “aterradora”. Continuó diciendo que nunca vio nada igual y aseguró que las tareas de identificación de los fallecidos serán complicadas.
“Podemos suponer que estaban vivos en el momento del choque e intentaron salir del autobús” pero las puertas estaban cerradas señaló el fiscal adjunto Borislav Sarafov, luego de las primeras observaciones en el lugar donde se podían ver los restos calcinados del vehículo.
Por último, el jefe de la policía nacional Stanimir Stanev indicó que “el conductor murió en el acto, con lo que no había nadie que pudiera abrir las puertas” y permitir a los pasajeros escapar. Los siete sobrevivientes viajaban en la parte trasera del micro, donde lograron romper una ventana y huir del fuego.
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