Hace algunas horas, el técnico argentino Gabriel Heinze fue despedido del Atlanta United en Estados Unidos y salieron nuevos detalles sobre la situación que llevó a los directivos a tomar esa decisión.
Varias fuentes revelaron a distintos medios de Estados Unidos las duras situaciones por las que pasaron los empleados, y ha derivado en una queja formal de parte de la Asociación de Jugadores de la Major League Soccer (MLS) ante las autoridades. El reclamo argumenta numerosas violaciones al convenio colectivo de trabajo.
Además, el cuerpo técnico de Heinze no les hablaba a los jugadores; usaba intermediarios.
El periodista estadounidense, Doug McIntyre habló con distintas fuentes dentro del club, que le contaron anónimamente que el cuerpo técnico de Heinze limitaba la cantidad de agua en los entrenamientos, al punto de que los doctores del club debían intervenir. Por otro lado, no les daban a los jugadores los días libres obligatorios y los forzaban a responder sus teléfonos en todo momento.
"Las tácticas y el fútbol son una cosa, pero pasaban otras situaciones fuera de la cancha por lo que los jugadores estaban cansados mentalmente", detalló una fuente del club. Otra persona dentro del club dijo anónimamente que "estos seis meses fueron un infierno".
Además, el cuerpo técnico de Heinze no les hablaba a los jugadores, usaban intermediarios. Tampoco les interesaba hacer un esfuerzo en desarrollar las relaciones con los empleados del club y, en consecuencia, había una gran falta de comunicación.
Por último, otras fuentes afirmaron que la pelea que tuvo con el delantero Josef Martínez no fue la razón de su despido, pero que probablemente lo haya acelerado.
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