Boca empató sin goles ante Rosario Central en un partido que significó el regreso de Carlos Tévez a La Bombonera y en el que ambos equipos erraron un penal.
Ante un estadio lleno que alentó sin parar, los dirigidos por Hugo Ibarra completaron otro deslucido encuentro en el que apenas crearon situaciones de riesgo y cerraron su segundo empate sin goles consecutivo.
Lo más emocionante estuvo en el primer tiempo, en que ambos cuadros contaron con una inmejorable opción de ponerse en ventaja pero la desperdiciaron.
Primero fue Gaspar Servio, el arquero de Rosario, quien decidió patear el tiro penal decretado por una mano de Luis Advíncula en el área. Su ejecución, sin embargo, fue defectuosa- suave y al centro- y permitió que Agustín Rossi sacara el balón con los pies ante el clamor de la tribuna, que vitoreó su nombre pidiendo que se quede en el equipo.
Sobre el final del primer tiempo vino el turno de Boca, tras una falta que se fabricó solo Sebastián Villa, por lejos el más incisivo del local. Tras cinco injustificados minutos de revisión VAR, el árbitro decretó la pena máxima que, ante la ausencia de Darío Benedetto- castigado junto a Carlos Zambrano por irse a las piñas- fue cobrada por Pol Fernández.
El mediocampista, sin embargo, pateó casi tan mal como lo había hecho el arquero de Rosario, que tuvo su revancha antes de que terminara el primer tiempo.
En el segundo, el partido lejos de levantar, cayó en un pozo somnífero, con un Boca Juniors anémico que sólo tuvo a Sebastián Villa como agente de peligro. En Rosario, en tanto, destacó la participación del joven Federico Buonanotte, que logró inquietar en un par de ocasiones a Rossi. Nada más.
Con el empate, Boca llegó a 20 unidades y se mantiene en el 13° lugar, a nueve puntos del líder Atlético Tucumán. Rosario Central, en tanto, quedó 16° con 18.
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