El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, defendió la intervención del ministerio de Seguridad en Villa Mascardi, la semana pasada, que detonó la renuncia de la ministra de la Mujer Elizabeth Gómez Alcorta.
“Nadie reprimió nada”, dijo el ministro en una entrevista con C5N, mientras el presidente Alberto Fernández se reunía con comunidades mapuche. “Nosotros creemos que no tienen que haber gestos de violencia, y se lo inculcamos y se lo hacemos saber a los oficiales y a la tropa que va a participar”, dijo
Nosotros creemos que no tienen que haber gestos de violencia, y se lo inculcamos y se lo hacemos saber a los oficiales y a la tropa que va a participar
Para Fernández, durante la intervención se mantuvieron protocolos para un “uso racional de la fuerza", advirtió Fernández, que a su juicio fueron muy distintos a "la cacería humana en cabeza del gobierno de Cambiemos”.
Y reveló que mantiene una identificación ancestral con el pueblo mapuche: “Según contaba mi abuela, tengo sangre de pueblo originario”, dijo.
No obstante, cuestionó el uso de la fuerza que han impulsado algunas comunidades. “¿Es necesario prender fuego, quedarte con campos que no están dentro del marco?”, dijo.
Fernández, además, aseguró que se mantuvo en todo momento el resguardo de los derechos de las personas detenidas, incluidos los de una mujer embarazada que está cerca del parto. “Las señoras que estaban ahí son siete y cinco chicos. La orden de la jueza fue llevarlas al lugar que ella indicó y después se trasladaron a un lugar de la PSA en condiciones lo más cuidadas posibles. A una de las señoras se la llevó a un hospital porque estaba por parir”, dijo.
