El documental de Michael J. Fox, Still, dirigido por Davis Guggenheim, se estrenó en enero de 2023. El director contó que el actor, que padece la enfermedad de Parkinson, tuvo un único pedido a la hora de filmar una película autobiográfica que devele su carrera y el padecimiento de salud que atraviesa: "no quiero violines".
En una conversación íntima, Guggenheim develó que el pedido de Michael Fox se debió a que no quería darle una imagen de víctima a sus espectadores: "No quiero ser objeto de lástima", le indicó el actor al director cuando estaban decidiendo el guión.
El argumento sigue la historia de vida de Michael Fox, desde su popularidad desmedida e -inesperada- en los 80s hasta la lucha que protagoniza día a día para sobrellevar la enfermedad terminal, Parkinson, que le diagnosticaron cuando tenía 29 años.
En un evento especial de Variety sobre la serie, nominada a los Emmy, el director se juntó con el editor del documental, Machael Harte, y ambos repasaron la filmografía del actor de la saga Volver al futuro, que obsesionó a más de una generación, después del estreno de la primera película de la saga en 1985.

"Crecí obsesionado con Volver al futuro, la vi 150 veces", confesó el editor entre risas, y contó que su acercamiento al cine se produjo gracias a las películas de Fox, que alquilaba en el videoclub de su barrio de Donegal, Irlanda, donde creció.
En la película también tratan la forma en la que el actor trató de "esconder" su enfermedad y comenzó a tomar medicamentos que aplacaran los síntomas. Sobre este gesto y la forma en la que buscaron mostrarlo en el documental, Harte puntualizó sobre una de las sitcom más famosas de Fox, Spin City, de la que indicó, "es el Everest".
En el proceso de investigación, contó el productor, "hicimos un trabajo de investigación forense en el que peinamos esos clips porque estábamos buscando los momentos en donde se nota que está tratando de esconder el Parkinson". En el trailer se lo ve a Michael Fox confesando que, después de mucho esconderse, llegó un momento en el que se cansó, "me di cuenta de que esconder esa parte mía era una forma de renunciar".
Los realizadores también contaron que, durante el proceso de entrevistas que le hicieron a Fox, su nivel de apertura para responder las preguntas fue "un regalo", "Michael estaba ahí, disponible, y eso fue un tesoro para nosotros".
El director describió Still como "una historia de amor al talento de Fox". "Solemos creer que la gente graciosa, justamente porque es graciosa, no son actores serios. Pero cuando miras para atrás, te das cuenta de lo talentoso que era cuando se movía en el humor", indicó emocionado.